El director del famoso templo Shaolin, considerada la cuna del kung-fu en China, será destituido por sus acciones “extremadamente” inapropiadas tras haber sido investigado por malversación de fondos, indicó la máxima autoridad budista del país.
El monasterio de fama mundial anunció el domingo que sospecha que el abad Shi Yongxin, apoyado el “monje CEO” porque fundó muchas empresas en el extranjero, había “desviado fondos destinados a proyectos y bienes del templo”.
También habría “incumplido gravemente los preceptos budistas” y mantenidos “relaciones inapropiadas con varias mujeres, con las que supuestamente tuvieron hijos ilegítimos”, indicó un comunicado.
Varios servicios están llevando a cabo una investigación conjunta, según el templo.
La Asociación Budista de China, supervisada por el Partido Comunista, en el poder, dijo este lunes que iba a cancelar el certificado de ordenación del monje.
“Las acciones de Shi Yongxin son de una naturaleza extremadamente perjudicial y dañan gravemente la reputación de la comunidad budista y la imagen de los monjes”, indicó en un comunicado.
También expresó su “firme apoyo” a las iniciativas encaminadas a sancionarlo “de acuerdo con la ley”.
La mentalidad comercial del monje Shi Yongxin
Varios exmonjes ya habían acusado a Shi Yongxin de llevar una vida de lujo, asegurando que es propietario de una flota de automóviles de gama alta y acusándole de haber malversado dinero de una empresa administrada por el templo.
En China, las autoridades controlan directamente el nombramiento de líderes religiosos y su comportamiento considerado “inapropiado” puede llevar a su destitución.
“Cuando la mente es pura, la Tierra Pura está ahí, en el momento presente”, escribió Shi Yongxin la semana pasada en su última publicación en la red social Weibo.
El caso genera revuelo en las redes sociales chinas y en Weibo una palabra clave vinculada al escándalo llevaba más de 560 millones de visualizaciones.
En 2015, el templo negó las acusaciones de los medios estatales chinos, calificándolas de “calumnias maliciosas”.
Shi Yongxin, de 59 años, adquirió el cargo de abad en 1999 y en las décadas siguientes contribuyó a la expansión internacional de los estudios Shaolin, que combina el aprendizaje del budismo zen y la práctica de artes marciales.
También ayudó al templo a fundar numerosas empresas en el extranjero, aunque recibió críticas por su enfoque se considera demasiado comercial.
En 2002 fue elegido vicepresidente de la asociación budista de China y también ha sido miembro de la Asamblea Nacional Popular, el máximo órgano legislativo del país.
El templo Shaolin, Fundada en el año 495 y situada en las montañas de Henan, está considerada la cuna del budismo zen y del kung-fu chino.
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