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La justicia de Italia le acaba de imponer una condena de 8 años de cárcel a un sacerdote colombiano que le daba dinero a menos de edad para accederlos sexualmente.
Su nombre es Carlos Alberto Pérez Arco, tiene 42 años y fuen sentenciado a pagar 96 meses de cárcel por el caso concreto de dos niños a los que les dio hasta 110 euros para que lo acompañaran en caminatas.
De acuerdo con el expediente judicial, recogido por la prensa italiana, era en esos recorridos en los que el cura colombiano aprovechaba para violentar sexualmente a los menores, quienes no superan los 14 años.
Esta situación, por la que el sacerdote católico está aislado en un centro de recuperación –como llaman a los sitios a los que llevan a los curas condenados por abuso sexual–, se registró en una población de Roma que se conoce como Carpineto Romano.
En esa provincia se cuenta el Instituto Misionero San Juan Eudes, del cual era miembro Pérez Arco, y en 2021 –tras las primeras denuncias– se registró la detención de este sacerdote.
La investigación también reveló que en el teléfono celular del cura sentenciado por pedófilo encontraron fotos de las víctimas y material pornográfico.
“Las investigaciones se iniciaron a raíz de las denuncias presentadas por los padres, quienes sospecharon cuando encontraron el dinero, 110 euros, que una de las víctimas afirmó hacer recibido del religioso en diversas ocasiones. El hombre solía poner el dinero en los bolsillos de los niños si estos se negaban a tomarlo directamente”, se lee en un artículo del diario Ilcorrieredellacitta.com.
Además, según esa misma publicación, el colombiano los comenzaba a buscar cuando los menores suspendían el contacto con él. Incluso, en la misma provincia romana, de acuerdo con medios de la zona, la población ya conocía sobre los antecedentes de abuso que rodearon a Pérez Arco.
“Cuando los padres de los niños les prohibían a sus hijos aceptar dinero del hombre, o les ordenaban romper la relación, este se negaba y mantenía el contacto. Las investigaciones revelaron que el dinero que les daban no eran donaciones desinteresadas, como él mismo decía, porque estaban ligadas a la relación enfermiza entre el religioso y los menores”, se indicó en un artículo recogido por Ilmessaggero.it.
Por todos estos hechos el sacerdote colombiano Carlos Alberto Pérez Arco, quien permanece en territorio italiano, no solo deberá pagar la sentencia de 8 años de cárcel, sino que también está obligado a desembolsar una indemnización de 40.000 euros por los daños causados a nivel civil.
Sobre este mismo sacerdote, Blu Radio había publicado un documento que advertía sobre sus conductas con menores durante una misión católica en África.
Además, la red conocida como L’Abuso –organización de víctimas de pedofilia en Italia– ha identificado más de 300 sacerdotes violadores en los últimos 15 años, incluyendo a este colombiano, responsables de los abusos de más de 1.300 personas.