Conozca las flores que llenan de colores a Medellín

Cámbulos, guayacanes, curazaos y más especies florecen al tiempo en la ciudad. ¿A qué se debe?

El sol y el ciclo normal de reproducción de las flores están relacionados a la floración de árboles como el guayacán o roble amarillo. FOTO Julio César Herrera
FOTO Camilo Suárez
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FOTO EL COLOMBIANO
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Por estos días somos testigos de una intensidad: la floración de los árboles de Medellín. Vamos caminando por una esquina, cruzando por una estación del Metroplús o en una calle cualquiera, y ahí está: un cámbulo, un guayacán rosado o amarillo, un curazao o un gualanday. Su belleza es tanta que nos llena de preguntas: ¿por qué florecen en esta época? ¿Por el sol? ¿Por las ganas de ser polinizadas? ¿Saben que las admiramos? ¿Lo hacen por seguirle la corriente al mote de “Ciudad de la eterna primavera”?

Sea como sea, las flores están en su apogeo y lo seguirán estando bajo este sol de febrero al que precedió una prolongada temporada de lluvias. El profesor León Morales, ingeniero forestal de la Universidad Nacional, dice que es imposible saber por qué sucede exactamente, pero puede obedecer a los días de verano, por un lado, y a que son ciclos normales que tienen los árboles para reproducirse, algo que está en su “programación genética”. Se trata, además, de una estrategia para seguir echando raíces. “Las flores son un elemento sexual de reproducción y después de las flores vienen los frutos y las semillas: los hijos nuevos del árbol o los árboles”. Así, las flores buscan ser polinizadas —¿cómo lograrlo sin llamar tanto la atención?— para hacer posible los frutos y semillas que garantizarán su supervivencia.

Una de las cosas más interesantes de este proceso es su “sincronía” con la floración en otras ciudades del mundo. “Uno se va a otras ciudades y encuentra que esa misma especie de árbol florece en ese momento en otra parte. Es todo un misterio. ¿A qué hora se llamaron para ponerse de acuerdo?”, se pregunta Morales.

Ese acuerdo entre especies nos deslumbra, pues pone hermosa a la ciudad, hace los días más coloridos y, encima, tapiza los caminos que quedan llenos de flores desparramadas.

Estas son las especies de árboles que por estos días tienen llena de colores a Medellín. Conózcalas.

Cámbulo (Erythrina poeppigiana)

Le han dedicado canciones como “Los cambulos y guayandales”. Su flor, de un naranja encendido casi rojo, nace en racimos. El poeppigina de su nombre científico proviene de Eduard Friedrich Poepig, un botánico que describió más de 4000 especies de plantas en Chile, Perú y Brasil. Existen discrepancias sobre su origen, si es de acá o de Venezuela, pero se ha consolidado como una “flor insignia” de Medellín, según el profesor León Morales.

Guayacán amarillo (Handroanthus chrysanthus)

También conocido como roble amarillo, la flor de esta especie nace en racimos que a su vez forman otros racimos. Toma su nombre del botánico brasileño Oswaldo Handro. Su altura máxima es de 35 metros y su diámetro de 1 metro. Pertenece a la familia Bignoniaces y se ubica en la América tropical. Son —por su color y su naturaleza tropical— las que llueven en Macondo después de la muerte de José Arcadio Buendía en “Cien años de soledad”.

Guayacán rosado (Tabebuia rosea)

Su flor rosada, muy llamativa, tiene cierta forma de campana que resalta aún más debido a su corteza gris o marrón. Puede alcanzar una altura de 40 metros. De la familia Bignoniaces, crece en Suramérica y Centroamérica. Al igual que otros guayacanes, su longevidad puede alcanzar los 60 años. Florece en las estaciones secas. Es el árbol nacional de El Salvador, donde se le conoce como “Maquilíshuat”.

Gualanday (Jacaranda caucana, Jacaranda mimosifolia)

¿Azul o morado? ¿Morado azuloso? Sobre el color de su flor, campanudas y lobuladas, no hay conclusiones. Este hermano de los guayacanes —de la misma familia Bignoniaces— comparten el mismo fruto en forma de cápsula. En Argentina, de donde es originario, se le conoce como Jacaranda, dice el profesor León Morales. Es común encontrarlo en parques, avenidas, andenes y plazas. “Jacaranda caucana” es el nombre de la especie nativa de Colombia y de otros países de la región.

Curazao (Bougainvillea)

Conocida en otras partes del país como trinitaria o veranera, esta planta nativa de los bosques tropicales húmedos del sur del continente es familiar para los antioqueños. Particularmente florece en épocas del año con fuerte sol y pocas lluvias. Son plantes que se trepan, como enredaderas, ayudadas por sus tallos, con espinas que les permiten sostenerse y subirse por las superficies. Las fucsias son las más comunes, pero también las hay amarillas , blancas, rojas y moradas.