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Con manos expertas y un oído afinado, Sergio se dedica a la fabricación, restauración y mantenimiento de instrumentos musicales, asegurando que cada uno conserve su esencia y calidad sonora. Foto: Julio César Herrera -
Peña, especializado en instrumentos de viento metal como flautas, trompetas y saxofones, Peña domina los secretos de la acústica y la precisión que requieren estos delicados instrumentos. Foto: Julio César Herrera -
Su taller es un espacio donde la paciencia y la destreza se combinan para dar nueva vida a instrumentos desgastados por el tiempo y el uso. Foto: Julio César Herrera -
Pero su maestría no se limita solo a los instrumentos de viento. Con la misma dedicación, Sergio trabaja con instrumentos de cuerda pulsada, como violines, violas y guitarras. Foto: Julio César Herrera -
A través de técnicas tradicionales y herramientas especializadas, logra recuperar sonidos que parecían perdidos, convirtiéndose en un guardián de la música y la tradición artesanal. Foto: Julio César Herrera -
Restaurar un violín centenario o afinar una guitarra con décadas de historia es parte de su día a día. Foto: Julio César Herrera -
El oficio de lutier, aunque poco conocido para muchos, es fundamental en la música. Sin estos artesanos, los instrumentos no tendrían la misma vida ni el mismo carácter. Foto: Julio César Herrera -
Sergio, con sus manos curtidas y su mirada penetrante, es un maestro en la construcción y restauración de instrumentos musicales, un guardián de la tradición que se niega a dejar morir el legado de los antiguos artesanos. Foto: Julio César Herrera -
El oficio de lutier es uno de los más antiguos y nobles del mundo. Sin embargo, en la era de la producción en masa y la obsolescencia programada, este arte milenario se encuentra en peligro de extinción. Foto: Julio César Herrera
El oficio de lutier sigue vivo con Sergio Peña en Medellín
En un rincón de Medellín, donde la tradición y la música se entrelazan, el lutier Sergio Peña mantiene vivo un arte que, por años, estuvo en riesgo de desaparecer
