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Matilde y Humberto tuvieron siete hijos a más de 3.500 metros sobre el nivel del mar, criados en una casa recóndita incrustada en un valle rodeado de nacimientos de agua y frailejones: Llano Grande. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
En juego está un ecosistema frágil, irremplazable, que provee agua a diez municipios de Antioquia y otro más en el Chocó. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Escalar el páramo, aun en las circunstancias más favorables, es una experiencia brutal, dolorosa y angustiante. Para muchos termina convertida en la prueba física más grande de sus vidas. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
El complejo que constituye este páramo conforma la estrella hidrográfica más importante del norte de la Cordillera Occidental. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Este ecosistema cuenta con 15.396 hectáreas, están presente en 10 municipios de Antioquía y uno del Chocó. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Las peludas hojas de los frailejones que captan agua y la almacenan, las depresiones que deslizan el agua hacia las llanuras y sus complejos lagunares. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Este páramo tiene una gran riqueza hídrica y es el hogar natural del oso de anteojos. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Existen gran variedad de climas, lo que da espacio a la existencia de diversas plantas, animales y hermosas cascadas. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
El Páramo de Sol tiene la mayor altura en Antioquia con 4.080 m.s.n.m. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Hace cuatro años, Diana Navarro, hija de Matilde, le anunció a las autoridades del municipio la prohibición del turismo en sus tierras, una decisión que les acarreó algunas enemistades. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Decidieron prohibir el paso de turistas hacia sus tierras en Llano Grande, para proteger el gran santuario de los frailejones gigantes y un enclave vital para la continuidad del páramo. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
En julio de 2022 el país conoció por primera vez los excesos, cuando la Alcaldía de Urrao y Corpourabá anunciaron el cierre en medio de imágenes que delataban kilos de basura abandonada y frailejones quemados y mutilados. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
José Fernando Navarro, biólogo investigador de la Universidad de Antioquia, comenta: “el páramo es un macizo ígneo y volcánico moldeado pacientemente por tres glaciaciones que ocurrieron 10.000 años antes de Cristo”. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
La Universidad de Antioquia adelanta un estudio de capacidad de carga que, asegura, deberá estar listo a mitad de año, justo cuando vence la prórroga del cierre del páramo, el 30 de julio de 2023. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
En julio de 2022 el país conoció por primera vez los excesos, cuando la Alcaldía de Urrao y Corpourabá anunciaron el cierre en medio de imágenes que delataban kilos de basura abandonada y frailejones quemados y mutilados. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
El problema era un secreto a voces desde hacía años y dejó anécdotas tan desoladoras como inverosímiles. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Diana Navarro recuerda que le tocó ver a más de 3.600 metros un matrimonio de unos europeos con decenas de invitados y lujos de todo tipo: licor, un arsenal de alta cocina y cómodos muebles que llegaron a lomo de mula. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
Diana tiene claro que solo un acuerdo social garantizará el futuro de la montaña. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO. -
En definitiva a pesar de su belleza y por fragilidad del páramo, no es viable para un turismo ya que el impacto de destrucción seria irreparable ambientalmente. Foto: MANUEL SALDARRIAGA QUINTERO.
En imágenes | Así es como una familia cuida el Páramo del Sol en Urrao
Dos familias, inspiradas por una matrona rebelde, libran una defensa para garantizar el futuro de este lugar, amenazado por un turismo que, aunque está en suspenso, ya mostró su potencial destructivo.
