La aerolínea está dispuesta a hacer una subasta de activos para lograr que autoricen la integración.
Cada vez está más cerca la respuesta de la Aeronáutica Civil a la solicitud de Avianca y Viva Air para integrarse en un mismo grupo empresarial.
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La decisión tiene en ascuas a los accionistas controlantes de Avianca, pues los cerca de US$240 millones que pagaron para hacerse con los derechos económicos de Viva podrían quedar en el limbo de darse una negativa por parte de la Aerocivil.
“Si Viva quiebra eso no va a valer absolutamente nada”, dijo Frederico Pedreira, jefe de operaciones de Avianca, consultado sobre qué pasaría con los derechos adquiridos en caso de que la aerolínea de bajo costo sea liquidada.
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La venia de las autoridades es crucial porque los accionistas de Avianca podrían acceder a los derechos políticos de Viva, que son los que dan el poder de decisión, y financiar el rescate para no perder su inversión.
En esa línea se conoció lo que Avianca está dispuesta a ceder con tal de obtener el permiso.
La aerolínea ofreció 155 slots –permisos de aterrizaje y despegue– en el aeropuerto de Bogotá, en conjunto con Viva, mantener el modelo de la low cost y poner un techo tarifario en las rutas con presencia significativa.
Hasta ahí, todo está en el marco de lo que habían anunciado. Pero llama la atención que Avianca ofrece como opción B la devolución de slots con algunas condiciones diferentes y le sumaría hasta la subasta de un grupo de activos entre los que se incluyen cinco aviones y los contratos (64 slots en El Dorado, empleados, etc) necesarios para la operación independiente de los mismos.
Según fuentes del sector, los terceros interesados en el proceso, que básicamente son las competidoras más fuertes de Viva y Avianca, no quedaron contentos principalmente con el tema de slots, pues los que se devolverían son en franjas poco atractivas.
Además, no gustó que se entregarían slots impares, es decir, implicarían que las aerolíneas beneficiarias no pudieran hacer que los aviones que cubran una ruta puedan volver el mismo día al aeropuerto de Bogotá.
