Desde hace cuatro años la Organización de las Naciones Unidas (ONU) planteó una agenda de 17 objetivos con la idea de cerrar la brecha a razón de la diferencia social y económica que se generaba de prácticas discriminatorias. Prácticas que según el organismo alejaban a la sociedad de la equidad.
Colombia, según la Comisión Económica para América y el Caribe (Cepal) ha tenido una serie de avances en inclusión financiera, y aprovechamiento económico de recursos naturales, además de hacer del sector agrícola una actividad más responsable con el medioambiente y en la que sus productores sean los principales beneficiados económicos. Sin embargo, el país flaquea en la lucha por la igualdad de género en ámbitos laborales.
El objetivo mancomunado está en hacer de la Agenda 2030 (plan de cumplimiento del desarrollo sostenible) una iniciativa que muestre resultados palpables. Colombia, según la Cepal, ha avanzado en obligar a las compañías a hacer más eficiente el uso de recursos naturales para su operación.
Igualmente, destaca el esfuerzo de las entidades financieras en la atención a víctimas del conflicto que quieren iniciar una vida crediticia o buscan recursos para liderar un emprendimiento. Si se revisa el número de acciones que han llevado a cabo las naciones en la región para encontrar esos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Colombia es décima, con 65 acciones de fortalecimiento de capacidades.
Agro y empresas
La Cepal destaca que con el proyecto Ganadería Colombiana Sostenible se “busca incrementar en un 5 % la producción de carne y leche por hectárea, así como reducir el consumo de insumos externos, y disminuir los gastos de fertilización y control de moscas. La experiencia incluye 2.491 fincas (72 % de pequeños ganaderos) con un área total de 113.707 hectáreas distribuidas en 83 municipalidades”.
Para Raúl Ávila, profesor experto en empresas y economía de la Universidad Nacional, los avances en esa materia se adjudican a un interés mancomunado entre productores y empresarios.
“Hay que sumarle que las mismas empresas han entendido que una correcta utilización de recursos ambientales no sólo garantizar una reducción del impacto medioambiental, sino también aporta para que las compañías encuentren formas de reducir costos reutilizando recursos como aguas lluvia” (ver Paréntesis).
Tal ha sido el beneficio, que en ese campo el país, tras cinco años de implementación, ha mejorado la calidad del agua que fluye cerca de los predios, con un 72,7 % menos de demanda bioquímica de oxígeno. “Se ha reducido la erosión de la tierra en siete toneladas por hectárea y se ha incrementado un 32 % la presencia de pájaros”, recalca la Cepal en su informe.
Laboral, la tarea
El quinto objetivo que plantea la ONU como vital para alcanzar un desarrollo sostentible, es el de la igualdad de género, también en ámbitos laborales. Situación que incluso para la Organización Mundial del Trabajo (OIT), urge transformar en la región.
Un reciente informe de esa organización encontró que en una encuesta aplicada a 50 multinacionales en el mundo, “las mujeres ocupan el 18 % de las presidencias y el 26 % de las vicepresidencias en los comités permanentes, un resultado que sin embargo refleja el aumento de la participación femenina en cargos directivos subalternos”.
Para Natalia Moreno Salamanca, docente de la Escuela de Género de la Universidad Nacional, el problema de esa brecha laboral está en que hay situaciones estructurales y culturales que no ayudan.
“Sigue existiendo esa falsa percepción de que las mujeres no podemos desarrollar tareas de liderazgo, de que no servimos para dirigir. Además, en Colombia, del total de mujeres ocupadas, 60 % lo hacen en trabajos informales. Se le sigue entregando el cuidado de niños y ancianos a las mujeres, cuando debería ser una tarea de Estado. Aún falta mucho camino por recorrer”, explicó Moreno.
Concluye la Cepal diciendo que el 49 % de los trabajadores de la región están ocupados en sectores de baja productividad, y esta cifra asciende al 53 % en las mujeres (frente a un 46,6% en el caso de los hombres). “La categoría de menor remuneración mensual es la de trabajadores del servicio doméstico, compuesta en su mayor parte por mujeres” .