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Entre enero y marzo la textilera Fabricato totalizó ventas por 72.409 millones de pesos, cifra menor en 3,7 % a los 75.215 millones reportados en los mismos tres meses durante el año pasado.
Pese a esa disminución en los ingresos, la compañía señaló que redujo el nivel de pérdidas en un 32,75 %, pues mientras en el primer trimestre del año pasado estas sumaron 13.246 millones de pesos, en el mismo periodo de este año el resultado negativo fue de 8.974 millones.
Pero, ¿cuál fue el entorno para los negocios en los primeros meses de este año? En el informe de resultados trimestrales enviado por la compañía a la Superintendencia Financiera, se indicó que el ambiente de negocios tuvo dos escenarios distintos.
Así, en enero y febrero se apreció la tendencia favorable percibida en el segundo semestre del 2019, con indicadores positivos tanto para la economía como para el sector textil.
Marzo, por su parte, con las actividades comerciales e industriales interrumpidas a partir del 24 de marzo en todo el territorio nacional, por la pandemia del covid-19, se destacó por la imposibilidad de ofrecer productos y servicios a través de los canales regulares, por el distanciamiento social obligatorio (ver ¿Qué sigue?).
En consonancia con la dinámica que tuvieron los tres primeros meses de este año, Fabricato precisó que entre enero y febrero sus ingresos fueron superiores en un 15 % frente a los mismo periodo del año anterior.
Esta mejora reflejó una mayor eficiencia operativa, más rendimiento en la adquisición de materias primas e insumos y un incremento de las ventas en segmentos de mayor valor agregado.
“Obviamente, los indicadores están considerando el primer bimestre, para que se permita un análisis en bases comparables. Cuando se incluye el mes de marzo la comparación se desvirtúa por haber sido un mes de 20 días, en el cual estimamos haber dejado de facturar 16.000 millones de pesos”, se lee en el informe de la empresa antioqueña.
Incluso en una coyuntura de emergencia económica y sanitaria, Fabricato percibe que hay oportunidades, entre ellas el aumento de demanda para los textiles con acabados especiales como el antifluido y el antibacterial, usados en el sector de salud.
Otro tema que seguramente cobrará relevancia en este proceso de salida de la crisis es la fuerza de la cadena de negocios, de las relaciones estratégicas con los proveedores y los clientes.
“En el caso de Fabricato, tener grandes empresas como proveedores, detentoras de tecnología de punta tanto en fibras como en químicos, nos permitirá reaccionar con la velocidad necesaria para atender a esta nueva demanda que se observa del sector salud”, mencionó en otro de su apartes el reporte empresarial.
La compañía textil espera que sus clientes, empresas sólidas y estructuradas, en su mayoría podrán ajustarse a las nuevas condiciones de mercado con la velocidad necesaria para superar la contingencia.
“Por esta razón, Fabricato tiene aproximadamente 70 % de su cartera asegurada, lo que ciertamente servirá como garantía para créditos futuros, necesarios para financiar parte del descalce que se producirá por el menor nivel de ventas, en especial de los meses de marzo, abril y mayo”, anotó la administración de la compañía en su informe.
Al reiniciar las actividades de construcción, desde el pasado 27 de abril, se estima que el ritmo se verá reducido por los protocolos de salud establecidos, pudiendo afectar los cronogramas definidos antes de la pandemia.
En ese contexto, entre los proyectos que componen Ciudad Fabricato, Oceana de vivienda avanza en la comercialización de las primeras 5 torres, de un total de 6. Para el proyecto Mediterránea, también de vivienda, se están comercializando sus 4 torres.