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Lugares en los que pasamos la vida
Por colores, estilos arquitectónicos o sensaciones, estos tres fotógrafos capturan su idea de vivienda.
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LAS CASITAS SOLITARIAS DE @SEJKKO -
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LA MIRADA GEOMÉTRICA DE @PAULBROUNS -
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@CIMKEDI Y SU ESTAMBUL DE COLORES -
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29 de enero de 2017
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Cuando Manuel Pita, Paul Brounds y Yener Tonur miran una casa o un edificio a través del lente de un cámara, todos ven cosas diferentes.
Por ejemplo, Manuel Pita ve libros que se están escribiendo solos: “Cuando conversamos y sentimos cosas en su interior. Cuando las limpiamos y compramos muebles, cuando adornamos sus paredes. También cuando llueve y sopla el viento, y pasan los días”.
En cambio, Paul Brounds no piensa en la idea de que alguien vive allí, solo mira la estructura, las cualidades abstractas de su arquitectura. “Las fuerzas que inspiran mi arte son los patrones geométricos, el ritmo y las líneas”, explica.
Y Yener Tonur solo ve colores, los cuales pueden cambiar una cotidianidad a la vez negativa. La manera en la que los rojos contrastan con los blancos, o cómo el cielo azul hace más impactantes las líneas de un edificio.
Estas son sus tres cuentas, en las que hablan más las fotografías que las palabras que las acompañan .
LAS CASITAS SOLITARIAS DE @SEJKKO
Su nombre es Manuel Pita, pero en Instagram se le conoce como @Sejkko, que en japonés significa niño sincero. Y tiene sentido porque, aunque Pita es un científico experto en inteligencia artificial, sus fotografías revelan una mirada infantil e inocente sobre el mundo. Su última serie de fotografías se llama ‘Lonely Houses’ (casas solitarias), y en ella pretende mostrar esa conexión que existe entre estar solo y estar en casa. Las casas de su colección son en su mayoría de Portugal, pero también Francia, España, Turquía y Suecia. Y aunque la Venezuela de su infancia no está en la fotos, sí permanece ese ideal de realismo mágico que lo obsesionó por muchos años.
Después de tomar más de cincuenta fotos sobre ese tema, su concepto de la palabra casa ha cambiado mucho. “Ahora, cuando pongo mi manos en una casa vieja, siento que ella me cuenta su larga historia, y me quedo allí por horas. Cuando toco una casa nueva, siento solo su potencial”, explica.
LA MIRADA GEOMÉTRICA DE @PAULBROUNS
Aunque al mirar las fotografías del holandés Paul Brounds sí se distinguen las ventanas y puertas de las edificaciones, la sensación que generan es de estar viendo un papel tapiz o una alfombra de patrones geométricos. Esto no es casualidad, si no el resultado de observar incansablemente la arquitectura urbana de las ciudades de su país.
Aunque la mayoría de sus fotografías las hace en tomas frontales, también se pueden encontrar planos en picado, contrapicado e incluso cenitales. Lo importante es que haya un patrón circular, cuadrado o triangular que cree un ritmo en la foto.
“Aparte de sus funciones básicas, como servir de casa, oficina o para contemplación, la arquitectura también tiene una dimensión gráfica y abstracta”, explica. También llama la atención que, a pesar de ser en grandes ciudades, los lugares de sus fotos parecen deshabitados.
Brouns nació en Ittervoort, una pequeña ciudad al sur de Holanda. Estudió Bellas Artes y enfocó su carrera en las posibilidades que le da la fotografía digital.
@CIMKEDI Y SU ESTAMBUL DE COLORES
Recorrer las publicaciones de Yener Torun y no debatirse entre si son pinturas o fotografías es casi imposible. Los colores limpios, líneas rectas y el perfeccionismo geométrico hacen de estas casi una ilusión visual. Además, cuando Torun incluye personas en sus fotografías, se esfuerza porque los colores y líneas de sus prendas coincidan con las de las estructuras y fachadas.
Sus fotos son casi todas tomadas en esta ciudad de Turquía, lo que suele llamar la atención porque representan una idea muy diferente a la que se tiene de esa ciudad. “Incluso personas que llevan años como residentes en Estambul no pueden creer que mis fotos sean de la ciudad en la que viven”, dice.
Esto no es coincidencia: en su primera publicación del año, horas después de la masacre en la que murieron asesinadas 39 personas en una discoteca de Estambul, Yener escribió: “En este nuevo año seguiré haciendo lo que me apasiona: regar vibras positivas a través de mi trabajo. Porque esa es la única manera de decirle a los terroristas que se jodan”.
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