“Conocido más que nada por mi trabajo artístico con bananos”, precisa en su biografía de Instagram. Stephan Brusche en los últimos días ha saltado a la fama, pasó de ser uno de los artistas más conocidos en la red fotográfica, a protagonizar artículos en prestigiosos medios internacionales como la revista Time, ABC, Cosmopolitan, entre otros.
“Todo empezó con mi cuenta personal en Instagram. Publiqué algunos de mis trabajos con frutas y los de los bananos tuvieron especial acogida entre mis amigos. Luego, otras cuentas importantes de Instagram recomendaron y republicaron mis fotografías, lo que llamó la atención de Bored Panda, un portal muy popular que se dedica a mostrar nuevos artistas. Desde ahí todo se volvió muy viral”.
Pero la súbita fama no llegó por suerte, Stephan es un talentoso artista por naturaleza: desde muy pequeño se apasionó por el dibujo tradicional, luego estudió diseño gráfico y hoy, a sus 37 años de edad, es un artista que se dedica a experimentar con diferentes técnicas y a comercializar su trabajo digitalmente.
“Suelo experimentar con web cómics en el portal mws.sb77.nl . También me apasionan los gnomos, por eso ocasionalmente hago trabajos con ellos - en la mayoría mueren de manera trágica-. Además de piezas gráficas, también creo productos para el hogar, casi todos para cocina”.
En medio de tantos artistas emergentes, el trabajo de Stephan sobresale por su gran carga creativa, por la simpleza de sus modelos y lo universal de sus propuestas: los “tomates ninjas” o el “Kiwi Pac Man, por ejemplo, muestran personajes de la cultura popular de manera insospechada.
Pero para él, parte del éxito de la serie de los bananos se debe a los atributos de esta deliciosa fruta, su color brillante y su sugerente forma.
“Creo que mis trabajos con frutas muestran cosas que nos interesan. Yo siempre he amado los animales, por eso es que esta serie incluye elefantes, perezosos y más. También soy amante del cine y la música, así que esto también lo verán reflejado en las piezas”.
Aunque su cuenta en Instagram lleva varios meses abierta, su éxito (que ahora también llegó a Facebook) es relativamente reciente. Su esposa, una bloguera dedicada a la moda, es una de sus grandes inspiraciones. De hecho ella fue quien tuvo la idea de abrir un perfil en la red social para mostrar su trabajo artístico.
“Yo le recomendaría a los nuevos artistas que se metan en estos nuevos medios, que se conecten con otros artistas y que se aseguren de que su firma esté siempre en sus piezas. También que estén seguros de lo que hacen, que creen su propio estilo y no se dejen distraer por lo que otros artistas publican”.
Para conocer más sobre el delicioso trabajo artístico de Stephan, puede seguirlo en Instagram como isteef o en Facebook como Stephan brusche o Bloody Gnomes. Le aseguramos que , además de hambre, será sorprendido gratamente por otras sensaciones.
