En la historia de la invención de la radio hay muchos nombres para mencionar: Marconi, Clerk, Cervera. También habría que hablar de conceptos: ondas electromagnéticas, ondas de radio y sus generadores. Fue desde los últimos 30 años del siglo XIX que empezaron los desarrollos y descubrimientos, y solo hasta el 2011 que la Unesco declaró el 13 de febrero como el Día Mundial de la Radio.
Un medio para informar y para imaginar. Difusor de historias, de música, de noticias. Para Diego Londoño, periodista de Señal Radiónica, un medio de compañía, que a través de los años ha llegado a diferentes públicos porque se posibilita para la multifunción. “Es el teatro de la imaginación, la inmediatez, una plataforma que exige una producción distinta a otras como la televisión”, comenta.
Entre los sucesos memorables que se contaron por radio en Colombia están las llegadas de John F. Kennedy y de Pablo VI. También se contaron historias como las de Kaliman, La Ley Contra el Hampa o las de Montecristo.
Ahora la radio avanza en las plataformas digitales. Las análogas se conservan, son compañeras inseparables de algunos. Sin embargo, según Londoño, la digital ya no impone tiempos para escuchar, “el oyente es el que manda, el que escoge. Las radios digitales funcionan por medio de streaming y luego puedes encontrar los audios o podcasts y descargarlos. Eso es lo que se vive ahora, ese es también el futuro de ella”.
Sobre la radio en internet, el ministro de las Tecnologías de la información y las comunicaciones, Diego Molano, menciona que “en estos días de internet, en el mundo se avanza a pasos acelerados en el desarrollo de la radio digital. Nuestro reto en Colombia es ponerla a tono con las TIC, con el aprovechamiento de los desarrollos tecnológicos y con estrategias enfocadas en el fomento a la creación de contenidos convergentes y transmedia”.
Frente a la transmedia ya hay avances. Londoño cuenta que mientras narra sus crónicas, la gente puede ingresar a la página de la emisora y ver fotos o videos sobre lo que él está contando. A eso apunta a ese concepto, a múltiples plataformas para contar algo. Sin embargo, según él, el encanto de la radio sigue siendo que a partir de la voz la gente imagine.