Ciclos de estudios y constancia dieron sus frutos este diciembre cuando un grupo de 300 internos de la cárcel Bellavista logró obtener los diplomas que los acreditan como graduandos.
Los cursos académicos fueron gestionados por el Inpec, entidad que en alianza con la Institución Educativa San Judas Tadeo de Bello y el Sena formaron a los reclusos en emprendimiento, marroquinería, informática, interpretación de planos y ejecución de programas deportivos. Otro grupo logró solventar las materias y accedió al grado de bachiller.
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“Vale resaltar el esfuerzo con los que cada uno de los privados de la libertad asumieron su formación académica y para el trabajo, logrando la finalización de sus estudios, adhiriéndose a los procesos de resocialización y de esta manera adquiriendo herramientas de gran utilidad para su futura reincorporación a la sociedad”, indicó el Inpec en un comunicado en el que dio detalles del proceso que continuará para el 2020.
En la actualidad en este centro penitenciario hay 3.200 reclusos que conviven allí y que cumplen sus condenas por deudas con la justicia o están esperando que se desarrolle el juicio privados de la libertad.
