La huelga de hambre que adelantaban los 2.854 internos de la cárcel El Pedregal de Medellín, en el complejo masculino, fue suspendida luego de 38 horas tras acordar una reunión para este lunes a las 2:00 p.m., donde discutirán con las autoridades el motivo que originó la protesta: la mala calidad de la alimentación en la penitenciaria.
El dragoneante Luis Alberto Pinzón, presidente de un sindicato del Inpec, informó que los reclusos levantaron la huelga el sábado en la noche, y confirmó que el malestar no es solo por el estado en que llegan y se sirven los alimentos sino en que estos estaban siendo entregados en los patios.
“Hubo recomendaciones de la Contraloría y la Secretaría de Salud local que tuvieron que ser acatadas, porque la situación estaba generando fuerte rechazo por parte de los presos”, detalló Pinzón.
Los hombres que están privados de la libertad en este centro carcelario elaboraron un pliego de exigencias que presentarán este lunes a la dirección del penal, a la Unidad de Servicios Penitenciarios —quien adjudica el contrato con un prestador del servicio de alimentación—, la Defensoría del Pueblo y otras entidades que harán presencia en el encuentro.
“De la comida se encarga un proveedor al igual que pasa en 12 centros penitenciarios y 12 estaciones de policía en la ciudad. El malestar con ellos es general y hay quejas en todos estos lugares”, reveló Jorge Carmona, coordinador de la Mesa de soluciones para la crisis carcelaria en Antioquia.
Aseguró que el contrato con esta empresa tiene un valor que supera los $45.000 millones por lo que no se justifica que el servicio sea de mala calidad. Hace 20 días, denunció, a la estación de policía de La Candelaria llegó carne en estado de descomposición para ofrecer a los detenidos.
“Las personas están privadas de la libertad, pero no han perdido su condición de seres humanos. Por eso están en todo su derecho a exigir que se terminen los contratos con ese proveedor de alimentos, porque ya se habían firmado acuerdos antes y la situación no cambia”, aseveró Carmona.
Según pudo conocer EL COLOMBIANO, el contrato con la empresa encargada de la alimentación en El Pedregal y otros centros carcelarios estaría a punto de renovarse, por lo cual la reunión de este lunes es fundamental para definir soluciones, pues los reclusos aseguraron que de no llegar a ellas, reanudarán la huelga de hambre.