Por lo menos 11 familias comenzaron 2023 en medio de una tragedia. Hasta la tarde de ayer, ni la Gobernación ni la Policía tenían consolidada la cifra de los homicidios cometidos en las primeras 48 horas del año. Sin embargo, este medio conoció, de manera extraoficial, que serían 11 las personas muertas de manera violenta, 6 de ellas presentadas en el área metropolitana.
En la edición de ayer mencionamos los casos, pero todavía no había detalles. Con el paso de las horas se han ido esclareciendo, por lo menos, quiénes fueron las víctimas en este Año Nuevo.
Aunque los homicidios en este momento son materia de investigación, se sabe que varios de ellos sucedieron en medio de las celebraciones y el consumo de licor. La primera muerte violenta del año sucedió en el barrio Robledo, de Medellín, donde fue asesinado un joven de 19 años. Apenas iban 3 horas y 22 minutos cuando las autoridades recibieron el reporte de una persona herida con un arma cortopunzante.
Cuando llegaron al lugar se estableció que la víctima estaba celebrando la llegada de 2023 con otras personas. Al parecer, en medio de los tragos hubo una discusión que desencadenó en una riña. En el forcejeo fue apuñalado el joven, que quedó tendido. Aunque intentaron salvarle la vida llevándolo a un centro hospitalario, falleció. El agresor, un muchacho de 28 años, se entregó voluntariamente a la Policía y será procesado por este hecho.
Solo una hora después, también en el occidente de Medellín, tuvo lugar el segundo homicidio del año. Sucedió en el Doce de Octubre a las 4:03 de la mañana. Sobre este caso hay menos datos, pero se sabe que la víctima tenía 20 años y que otro joven, de 23 años, resultó herido. Contrario al primer homicidio, este se ocasionó con arma de fuego.
La estela de violencia se trasladó hasta Manrique, al otro lado del río. Allí, sobre las 7:50 de la mañana, las autoridades encontraron el cuerpo sin vida de un hombre de entre 35 y 40 años. Aún no se ha establecido la identidad de la víctima, pero se estableció que murió por heridas de un arma cortopunzante. No se sabe si fue un hecho premeditado o hizo parte de otro hecho de intolerancia en medio del trago y la celebración.