Por lo menos un mes antes de que las adecuaciones de los paraderos estén listas, la Alcaldía de Medellín anunció ayer el inicio de la operación instructiva de la nueva línea O, que será operada con buses eléctricos y que irá entre el sector Caribe (cerca a la Terminal del Norte) y la glorieta de la carrera 80 con la calle 30 (Belén).
“Es un punto de inflexión porque es apostarle al futuro de la ciudad. Hoy empiezan a rodar buses 100 % eléctricos, cero emisiones, que no contaminan y que le aportan a la calidad del aire. Se anexa una nueva línea al sistema de transporte”, indicó durante el viaje inaugural el alcalde Federico Gutiérrez Zuluaga.
De las 27 paradas que se tienen proyectadas, las autoridades estiman que 15 de ellas estén listas a mediados de diciembre y las doce restantes se entreguen antes de marzo de 2020. La intervención costará $15.000 millones.
“Es una infraestructura liviana, lo más importante es mover las redes bajo los pisos y pavimentos. Estamos haciendo bahías para que los buses se puedan detener sin afectar la movilidad de la carrera 80 y unos mobiliarios sencillos para que los pasajeros estén seguros y se protejan del clima”, indicó Andrés Uribe, secretario de Infraestructura de Medellín.
Otro de los aspectos a resaltar es que la nueva ruta de buses azules y verdes permitirá a los habitantes del área de influencia conectar con las principales líneas del sistema de transporte masivo: con la línea A por el norte (en Caribe), con la línea B en la estación Floresta y con las líneas 1 y 2 de metroplús en Belén La Palma (glorieta de la carrera 80 con la calle 30).
Los tiempos de operación
Por ahora, de acuerdo con el reporte oficial, serán 17 los buses que circularán en modo prueba, durante dos semanas, con las comunidades del área de influencia de este corredor, que conecta al norte con el occidente de la ciudad y que impacta a la zona universitaria de Robledo, compuesta por instituciones como el ITM, Colegio Mayor de Antioquia, el Pascual Bravo, la facultad de Minas de la Universidad Nacional y la sede Robledo de la Universidad de Antioquia.
“Esto es integración básica y tarifaria. Los buses están completamente equipados y además de ser cero emisiones hay que destacar que tienen red wifi y están habilitados para personas con condiciones de discapacidad”, indicó el alcalde Gutiérrez.
La operación comercial de la nueva línea O se proyecta para iniciar durante los primeros días de diciembre, aún cuando los paraderos estén en obra.
Adecuaciones pendientes
EL COLOMBIANO recorrió el pasado jueves todo el tramo que transitarán los buses eléctricos, entre la calle 30 y Caribe, y evidenció que además de que los buses ya hacían recorridos de prueba, buena parte de los paraderos como los de La Villa de Aburrá, Éxito de Laureles, estación Floresta del Metro y calle 53 ya están en obra.
Otros, como el que estará ubicado diagonal a la sede de Robledo de la U. de A., apenas está acordonado con malla naranja y no comienzan a ejecutarse las adecuaciones locativas que requieren.
Los primeros 17 buses eléctricos que comenzaron a rodar hacen parte de los 64 vehículos de la marca china BYD, adquiridos con recursos públicos por más de $75.000 millones y que se asumió como una solución temporal mientras se despeja el futuro del proyecto del tren ligero por este corredor de la ciudad.
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de los 27 paraderos nuevos deberían estar listos a mediados de diciembre.