Líderes de Caucasia les presentaron a los nuevos alcaldes del Bajo Cauca, el proyecto de construcción de un aeropuerto para la región, con una pista que permita la operación de aviones tipo jet en predios de la finca Paraguay, confiscada al narcotráfico.
Jaime Restrepo, gestor de la idea, dijo que este aeropuerto es vital para el desarrollo de Bajo Cauca, en especial en el posconflicto, lo que le permitiría a la región una comunicación directa con Bogotá y otras capitales.
Pero, el proyecto debe superar varios escollos. Uno de ellos es que el aeropuerto actual Juan H. White pertenece a la empresa ADA.
Según el subdirector de la Aeronáutica Civil, coronel Luis Carlos Córdoba en carta al actual alcalde Óscar Suárez, el nuevo aeropuerto fue concebido en el área de influencia del de ADA, “que ha cumplido con la normatividad aeronáutica por lo que cuenta con los permisos de operación y hasta tanto no se tenga una manifestación expresa del dueño sobre el deseo de cancelar el aeropuerto actual no se podrá dar trámite a la solicitud de construcción de uno nuevo en la zona por no cumplir con la norma de distancia mínima contemplada en el reglamento Aeronáutico de Colombia, RAC”.
Según Restrepo, este aeropuerto estaría a 5 kilómetros del actual y la distancia mínima son 10 kilómetros.
Un segundo obstáculo es el terreno en la finca Paraguay, entregado en 2013 por el Consejo Nacional de Estupefacientes a la Policía Nacional.