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Con alegría y orgullo; con la sensación de “haber ganado la materia”. Así cayó en la Universidad de Antioquia la decisión que tomó el pleno del experimento CMS de la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN) de aceptar a la Alma Mater como miembro pleno de este experimento.
Convirtiéndose así en la primera universidad pública de Colombia en alcanzar esta credencial.
En la votación, en la que participaron 80 miembros de la organización, la U.de.A. obtuvo 77 votos a favor y tres en contra. “Fue un proceso que comenzamos en diciembre pasado, después de dos años de ser miembros cooperantes, cuyo resultado recibimos con satisfacción. La mayor parte del equipo vio la transmisión de la votación en vivo desde Colombia. Un integrante vivió la experiencia en Ginebra, sede de la CERN”. señaló Nelson Vanegas, líder del Grupo de Fenomenología de Interacciones Fundamentales de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad.
Pero, ¿qué es el CERN y qué implica ser miembro pleno de uno de sus experimentos?
Habría que comenzar explicando que la CERN es uno de los mayores centros de investigación de física del mundo. Fue fundada en 1954 por 12 países europeos y en la actualidad la conforman 22 Estados, que comparten la financiación y la toma de decisiones en la organización. Bajo su operación se encuentra el laboratorio de física de partículas más grande del planeta, donde se intenta responder, entre otras preguntas, de qué está hecho el universo.
La CERN tiene dos experimentos: el ATLAS y el CMS. Fue en el segundo donde la Universidad comenzó su participación en 2017. “Desde el 2014, tal vez un poco más, en la rectoría de Alberto Uribe Correa, la Universidad se planteó unos retos de internacionalización. Entre los objetivos estuvo este centro de investigación. Pensamos cuáles eran los retos institucionales que teníamos que superar para trabajar con ellos y comenzamos a avanzar”, dice el profesor Vanegas.
Tras la solicitud y la posterior aceptación como miembro cooperante en el experimento CMS, llegaron dos años de trabajo continuo y duro. “Al comienzo, el grupo estaba conformado por un estudiante de doctorado y yo. Pasamos un tiempo allá (Ginebra) haciendo trabajo de laboratorio, análisis de datos, etc.
Hace un año vinculamos otro profesor de tiempo completo, un estudiante de doctorado nuevo, un pasante pos doctoral y un muchacho que nos ayuda en la parte de ingeniería de software. El equipo creció y quedó claro que teníamos un compromiso grande en hacer aportes en la parte técnica, tecnológica y científica del experimento”, señala Vanegas.
El trabajo del equipo se concentró en varios frentes: uno de ellos, con referencia al hardware, significó en la práctica hacer electrónica, ensamblaje de equipos y esencialmente un trabajo con instrumental. Otro campo fue el diseño, donde el grupo de investigación dedicó esfuerzos a aportar en el desarrollo y avance de equipos para los próximos años.
Finalmente, Vanegas y su grupo tomó los datos que ha arrojado el experimento desde 2016 hasta 2018, para poner a prueba modelos de física y corroborar o no cosas nuevas en el campo, una tarea titánica si se considera que el CERN tiene más datos que Google.
Todo ese trabajo logró que el equipo tuviera el impulso, el pasado diciembre, de proponer su nombre y el de la Universidad de Antioquia, como miembros plenos de este experimento.
En la Universidad y hacia el futuro
Pero los compromisos no son solo con este centro de investigación. “Hay una responsabilidad inmensa con la formación de capital humano, estudiantes de doctorado y maestría. Estar allí nos permite además trabajar en transferencia tecnológica y en ser fuente de innovación. Mas adelante nos gustaría hacernos responsables del diseño y construcción de equipos”, asegura el profesor.
El experimento CMS está proyectado para finalizar después de 2035. Durante el largo tiempo que queda de trabajo, este grupo de investigación de la U.de.A trabajará con las universidades más prestigiosas de Estados Unidos y Europa, donde podrá incidir en el futuro de este campo de la física. Al ser miembro pleno, la firma de los miembros de este equipo y de la Universidad aparecerá entre los investigadores de los estudios más importantes en esta área del planeta.
El logro es tan grande como las responsabilidades que contrae. “Seguir trabajando con dedicación y empeño. No es un misterio que estos objetivos se consiguen desde la universidad pública en medio de dificultades económicas que inciden. No hace menos de dos meses volvimos de un paro largo que pedía mayor presupuesto. Todo hace que nos produzca mucho más orgullo lograr esto siendo parte de esta universidad”, finaliza el docente.