-Buenos días, doctor Armitage -le dijo un locutor de radio al Alcalde de Cali.
-No me diga “doctor” -respondió el funcionario.
-¿Entonces cómo el digo?
-Dígame Maurice, o como quiera. Pero no “doctor.”
Desde la semana pasada a nadie le dicen “doctor” o “doctora” en la Alcaldía de Cali, ni siquiera al mismo jefe de la admnistración municipal, Maurice Armitage.
Un decreto pedagógico firmado el 7 de octubre por el alcalde Armitage prohibió el uso de la expresión “doctor” o “doctora” -y otras palabras que denoten jerarquía-, porque “la paz se genera generando igualdad, el día que nos dirijamos el uno al otro sin marcas de diferencias vamos a entendernos mejor”.
Así, en la Alcaldía de Cali, ni a los que tengan doctorado les pueden decir “doctor”.
La norma, que rige tanto para el personal de la planta como para los contratistas, se aplicará en el lenguaje verbal de las conversaciones cotidianas, pero también en todas las comunicaciones escritas.
“Vamos a dar ejemplo en Colombia, que tratemos con igualdad a las personas que vengan a solicitar un servicio a una ventanilla, así sea jefe o quien sea, todos somos iguales y deben servir con el mismo compromiso y efectividad que nos merecemos todos”, explicó el Alcalde de Cali.
Aunque no tiene precedentes en Colombia, que la iniciativa provenga de Armitage no es una sorpresa.
Desde que ganó las elecciones, el Alcalde de Cali prometió que iba a “gobernar desde las comunas” y a “despolitizar la administración”. Y a pesar de que es su primera experiencia en el sector público, Armitage ya cuenta con el 61% de aprobación de los caleños, según la última encuesta de Pulso País Colombia.
La medida, que pasó desapercibida la semana pasada por los resultados del plebiscito y el premio Nobel de Paz, fue celebrada por algunos usuarios en las redes sociales. De hecho, el mismo Armitage pidió a los ciudadanos que lo llamen “figura” o “Maurice”, su nombre de pila.