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Jhonatan Torres Campos aceptó ser al asesino de su cuñada, la psicóloga Adriana Pinzón. El confeso criminal podría reducir su condena en prisión en, por lo menos, 15 años. Esto después de que un juez avale un preacuerdo con la Fiscalía, más los beneficios que otorga el Código Penal por buena conducta.
Torres Campos se comprometió a aceptar los delitos de homicidio agravado y desaparición forzada. Las pruebas recopiladas por el ente acusador apuntan a que este hombre asesinó a Pinzón el pasado 7 de junio en Zipaquirá (Cundinamarca). La condena inicial por estos delitos –con el preacuerdo– sería de 28 años; sin embargo, el confeso criminal podría reducir en 15 años su pena, por lo que solo pagaría 13 años tras las rejas.
Inicialmente, el preacuerdo del confeso asesino debe ser analizado por un juez. Será él quien determine si la rebaja en la pena –acordada entre el imputado y la Fiscalía– es suficiente para purgar el crimen de la psicóloga.
Además del preacuerdo, que ya supone una rebaja del 50% en la condena, Torres Campos podría acceder a otros beneficios que otorga la ley.
De entrada, si el confeso asesino demuestra buen comportamiento, podría reducir su condena de 28 años a 16 años y 8 meses. Esto porque el Código Penal establece que los condenados pueden pedir libertad condicional una vez cumplan con las tres quintas partes de su pena.
“Libertad condicional: el Juez concederá la libertad condicional al condenado a pena privativa de la libertad mayor de tres (3) años, cuando haya cumplido las tres quintas partes de la condena, siempre que de su buena conducta en el establecimiento carcelario pueda el Juez deducir, motivadamente, que no existe necesidad para continuar con la ejecución de la pena”, dicta el artículo 64 del Código Penal.
Además del beneficio por buen comportamiento, Torres Campos podría acceder a estudio o trabajo dentro del penal. El Código Penal dicta que por cada dos días de labores la justicia le descontará uno a su condena. En el año podría descontar hasta 100 días. Por tanto, una vez cumpla 13 años de prisión, la justicia podría iniciar con el análisis de la libertad condicional.
El cuerpo de Pinzón fue hallado el pasado 23 de junio en una zanja ubicada a un costado de una vía de la vereda Río Frío. La mujer estaba oculta en cuatro bolsas plásticas y tenía heridas por arma blanca. De acuerdo con la investigación, Torres Campos fue la última persona que vio con vida a Adriana Pinzón.