Bogotá ha vivido noches de bloqueos y protestas por el paro nacional convocado por las centrales obreras, así como otros hechos aislados en dos localidades de la capital colombiana.
Una de esas localidades es Usaquén. En el barrio Verbenal se han generado protestas desde hace varios días por un presunto caso de abuso sexual contra una menor de edad.
El caso habría ocurrido en un lugar dedicado al cuidado de niños. Allí, un hombre habría abusado sexualmente de una niña de 10 años. El hombre habría sido detenido por las autoridades, pero al parecer fue liberado por no ser judicializado a tiempo.
Lea también: Noche violenta en Bogotá: encapuchados causaron disturbios y se enfrentaron a la Policía en dos localidades de la capital
Al no tener una orden de captura, el presunto agresor sexual habría huido al Tolima, algo que ha generado la furia de la población y que ha sido aprovechado por un grupo de manifestantes para vandalizar el sector durante varios días, como en la tarde del pasado martes, donde fue necesaria la intervención de miembros del UNDMO.
Dentro de estos disturbios, Yaneth Franco, una comerciante del sector que se ha visto afectada sus ventas por los hechos vandálicos de unos pocos.
Superados los hechos del pasado martes, doña Yaneth salió a trabajar ayer jueves, como lo hace todos los días, sin embargo, nuevamente los encapuchados llegaron al barrio Verbenal con la intención de causar disturbios y atacar el CAI de la zona.
Motivados en esta ocasión por los bloqueos que se vivían en la ciudad con relación al paro convocado por las centrales obreras, los encapuchados comenzaron a mover los contenedores de basura para quemarlos y a prenderle candela a varios objetos con la intención de bloquear las vías.
Inmediatamente, la mujer salió a reprender a quienes buscaban generar disturbios por tercer día consecutivo en la zona. “No vamos a permitir que el barrio nos lo conviertan en violencia”, le dijo Franco a los jóvenes, resaltando que “eso se llama vandalismo”.
Aunque al principio los manifestantes le reviraron a la comerciante, los involucrados decidieron hacerle caso a Yaneth y se fueron retirando de la zona, apagando lo que recién comenzaban a quemar y desistiendo de provocar nuevos disturbios en el barrio.
Yaneth Franco es una vendedora de empanadas, arepas y chorizos que lleva 20 años en la zona y que con sus ventas ha sostenido a su familia y ha costeado la educación de sus tres hijos, así se lo contó a Noticias RCN la mujer nacida en el municipio de Campohermoso, Boyacá.
Franco le confesó a Noticias Caracol que a los jóvenes los conocía desde hace tiempo y que el más adulto de los involucrados tenía si mucho 20 años. “Me enfrenté a todos y les dije: ¿Usted tiene esposa e hijos? ¿Educa muchachos? Yo sí educo hijos. Entonces cómo no nos van a dejar trabajar. Cómo voy a perder toda la comida que había hecho”, confesó la vendedora.
La acción de la comerciante fue reconocida por la Policía, el alcalde mayor Carlos Fernando Galán y el ministro de Defensa, general retirado Pedro Sánchez, quien además visitó su punto de venta.
“Ojalá existieran 50 millones de Yaneth con esa valentía para defender lo que nos pertenece. Que su historia inspire a muchos más a decir “no más violencia”, a cuidar sus barrios, sus negocios, su gente. Esa es la Colombia que queremos construir y por la que trabajamos todos los días”, le escribió el ministro a la vendedora en la red social X.
