El respiro que le dio al Eln la tregua unilateral declarada por ellos entre el 1 y el 30 de abril, pronto se le convirtió en un infierno. Tras anunciar el fin del cese, en menos de 15 días han visto las bajas en sus filas, no solo por la muerte en operaciones militares de mandos importantes, el asedio de la Fuerza Pública ha llevado a la deserción de sus integrantes.
El último golpe a esta guerrilla ocurrió ayer en la vereda La Cachaza, en Montecristo, Sur de Bolívar. En una operación coordinada entre el Ejército, la Fuerza Aérea, la Fiscalía y la Policía, murió alias “Mocho Tierra”, segundo cabecilla del frente Darío Ramírez Castro, comandado actualmente por alias Pirry.
Carlos Holmes Trujillo, ministro de Defensa, aseveró que “Mocho Tierra” era un objetivo de alto valor para el Gobierno y estaba señalado de planificar acciones terroristas en Antioquia y Bolívar. Tenía bajo su mando tres frentes del Eln y era el encargado de recolectar el dinero del narcotráfico y la minería ilegal que les dejaba aproximadamente 4.000 millones de pesos mensuales”.
Junto con él murieron otros tres guerrilleros, sin embargo, analistas militares dijeron a EL COLOMBIANO que los muertos tras el bombardeo pudieron ser más, pero se espera la confirmación luego de la operación rastrillo adelantada por las tropas ayer.
EL COLOMBIANO conoció que para adelantar la operación militar hubo comandos infiltrados durante 20 días, lo que permitió ubicar la zona campamentaria en la manigua que, al momento del bombardeo, “tenía por lo menos 30 guerrilleros”.
Capturan presunto cabecilla
Las malas noticias para el Eln también llegaron desde Casanare. En otro operativo conjunto entre Policía, Fiscalía y Ejército, fue capturado alias “Mateo”, sindicado por autoridades militares como el tercer cabecilla del frente de guerra José David Suárez.
Versiones entregadas ayer por el general Jairo Alejandro Fuentes Sandoval, comandante de la Octava División del Ejército, señalan que alias “Mateo”, tiene 38 años de edad, de los cuales ha pasado 17 en las filas de este grupo guerrillero. “Mateo”, informó el general Fuentes, era el encargado de la recolección del dinero de las extorsiones a empresas petroleras, contratistas y otros gremios económicos de los municipios Aguazul, Tauramena, Chámeza y Recetor, en Casanare.
“Además, era el cabecilla de la comisión Víctor Manuel Díaz. Al momento de la captura tenía una granada de fragmentación, una pistola y las boletas de extorsión que entregaba para recaudar fondos para el Eln”, dijo el general.
Un fiscal especializado de la seccional Casanare, le imputó a alias Mateo los delitos de rebelión agravada, en concurso con concierto para delinquir agravado y extorsión.
Desbandada entre las filas
La presión de las tropas en el Cauca ha llevado a que guerrilleros del Eln deserten y se acojan a la reincorporación.
Desde la Tercera División del Ejército informaron a este diario que “desde mediados de abril y hasta ayer, se han desmovilizado 40 guerrilleros del frente José María Becerra”.
Ante esta seguidilla de acciones ofensivas contra el Eln que lo han diezmado, el alto comisionado de Paz, Miguel Ceballos, insistió ayer en que el único camino que le queda a esta guerrilla es una negociación “y debe tomar una decisión política clara: si quiere o no continuar la paz”.