Está activo todo el tiempo, no descansa un solo minuto y en promedio, late cerca de 115.000 veces al día y 80 veces por minuto.
Si se compara la cantidad de sangre que bombea el corazón, los expertos hablan de cerca de un millón de barriles. Incluso, cuando dormimos el corazón continúa realizando un trabajo fuerte.
Dependiendo de la actividad física, en un deportista el número de latidos puede bajar a 60 veces por minuto e incluso, aumentarse hasta 150 cada sesenta segundos cuando se hace ejercicio.
Entre las particularidades de este órgano, además del peso, en las mujeres el corazón suele ser más pequeño y pesar cerca de 250 gramos, en ellos, en la edad adulta, puede alcanzar un peso de 300 a 350 gramos.
Finalmente, un aspecto que preocupa es el funcionamiento de este músculo cuando hay sobrepeso, pues debe duplicar su trabajo dado que la grasa obstruye las arterias coronarias y genera debilidad.