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Tras el anuncio de Sergio Fajardo de acudir a instancias internacionales para revisar el fallo de segunda instancia de la Contraloría que lo señala como uno de los responsables fiscales por la contingencia en Hidroituango, el precandidato presidencial se despachó en contra del contralor Carlos Felipe Córdoba, a quien calificó de "ficha política".
"Carlos Felipe Córdoba no es un Contralor, es una ficha política. Fue la mano derecha de Germán Vargas en las pasadas elecciones y tiene el apoyo de su paisano César Gaviria Trujillo", afirmó Fajardo en una rueda de prensa.
En su intervención, el precandidato por la Coalición Centro Esperanza recordó que en 2017, Córdoba, siendo auditor, "presentó informes falsos e ilegales", los cuales, según dijo, no tenían competencia alguna, "pretendiendo demostrar que en la gobernación había puesto la pauta a mi servicio y pagado favores a donantes de mi campaña con contratos".
"Todo se le derrumbó y el señor Córdoba nunca respondió por sus calumnias", agregó.
También recordó el discurso de posesión del Contralor en el que este le agradeció a los expresidentes Gaviria, Andrés Pastrana y Álvaro Uribe. “Así arrancó su discurso de posesión como contralor y en ese mismo instante empezó una administración que no controla, sino que baila sincronizadamente con todo lo que le favorece a este mal gobierno”, sostuvo el precandidato.
Añadió, además, que Córdoba “es el mismo político que fue militante de las juventudes uribistas, secretario privado de Vargas Lleras, y que nombró a la esposa del fiscal como contralora delegada”.
Pero los dardos contra el contralor Córdoba no pararon ahí. Fajardo enumeró tres situaciones en las que, a su juicio, queda en evidencia “el descaro y acomodo descarado” del proceso en la Contraloría.
Expuso que Juan Carlos Calderón España, bajo el manto de veedor ciudadano, permitió con un escrito suyo que la Contraloría iniciara un control excepcional en el caso Hidroituango.
“El supuesto ciudadano y veedor preocupado por el interés público es amigo
personal de Carlos Felipe Córdoba y un mes antes de pedir el control excepcional sobre Hidroituango, declaró en el Consejo de Estado a favor de su nombramiento como contralor”, dijo.
Y continuó: “En el mismo mes lanzó su libro ‘El veedor, control social, medios y Democracia’, con prólogo de adivinen quién: el mismo contralor que defendió en el Consejo de Estado”.
Agregó que a esto se suman trinos, contratos familiares en la Contraloría, y otras pruebas que aunque fueron borradas, la defensa de Fajardo recuperó. “Todas estas son piezas del rompecabezas que llevan años armando para eliminarnos jurídica y políticamente”.
Seguido a esto, Fajardo acusó a la Contraloría de cambiar la acusación inicial en su contra.
“Después de una supuesta y ardua investigación en la que invirtió tiempo y recursos, me acusaron por una sola conducta: no ejercer control. Entregué pruebas claras y contundentes. Hasta ahí debió llegar el caso”, expresó.
Sin embargo, el precandidato señaló que su sorpresa fue mayor cuando cambiaron rápidamente el documento. “Terminé imputado por varias conductas diferentes”.
“Le reprochan a mi gobernación haber estado de acuerdo con la construcción de un tercer túnel, pero miente la Contraloría al decir que la Junta Asesora de EPM lo contraindicaba. La Contraloría se negó a leer completos los documentos, se negó a oír a la Junta Asesora”, resaltó.
Fajardo recordó que: “Por esas mentiras, quien me condenó, Juliana Velasco Gregory, está siendo investigada por la Comisión de Disciplina Judicial”. Finalmente, denunció que el Contralor fue quien nombró a quienes debían decidir el fallo en segunda instancia.
“Aquí aparece otro nombre clave en todo este entuerto: Cristian Castro, Contralor Delegado Anticorrupción. Castro fue designado ponente, pero tras un artículo de prensa que dejaba al descubierto sus vínculos políticos, fue retirado del caso e incluso se fue de vacaciones”, dijo.
Sobre Castro aseguró: “¿Qué imparcialidad puede tener una persona que es ficha de César Gaviria, fue secretario general del Partido Liberal en Pereira, es ahijado político de Carlos Humberto Isaza, quien fue el Director de la Función Pública de Cesar Gaviria y es hoy contratista de la Contraloría?”.
“Ya ni siquiera disimulan. No les importa el proyecto, ni que existan seguros, ni el riesgo para la comunidad de Ituango”, concluyó el precandidato.