viernes
3 y 2
3 y 2
El sicario presuntamente relacionado con el atentado al director de la Unidad Nacional de Protección resultó tener todo un prontuario criminal que lo relaciona con la Corte Suprema de Justicia.
Tras el tiroteo entre los atacantes y los dos escoltas del director, uno de los criminales recibió un disparo mortal que lo dejó inmóvil frente a la casa del director de la Unidad, Augusto Rodríguez.
Tras las primeras pesquisas judiciales, las autoridades dieron con la identidad de dicho hombre armado, quien está registrado con el nombre de Fabián Esteven Duarte Ortiz, un colombiano de 29 años de edad que, al parecer, pertenecía a una poderosa banda de robos en Buenos Aires, Argentina.
Precisamente, El Tiempo reveló que el Duarte Ruiz aparece en un expediente de extradición a ese país por el delito de hurto.
En el documento completo, en poder de este diario, la Corte Suprema detalla que el pedido de extradición formal llegó para el ciudadano Diego Armando Téllez Lozada el pasado 22 de abril de 2021, pero la Corte se demoró en emitir el concepto favorable para ese envío hacia Argentina un año más, hasta junio de 2022.
Así las cosas, la Corte explica que los robos eran perpetrados por “una organización criminal de más de tres personas, destinada a sustraer dinero a personas que la extraían de entidades bancadas o financieras, en el ámbito de esta ciudad, entre febrero y mayo de 2018”.
Este expediente de la Corte aparece, por algún motivo, en las bases de datos de la Jurisdicción Especial para La Paz, JEP. Sin embargo, fuentes de la entidad le aseguraron a este diario que el hombre no está relacionado con la Jurisdicción de ninguna manera. Es decir, no está siendo investigado ni fue procesado por la JEP en ningún momento.
Por ahora, las autoridades intentan descubrir quiénes fueron los otros implicados en el ataque armado contra el director Rodríguez. Sobre ese caso, se sabe que él llegó a su casa junto a su hija menor y que estaba acompañado de su esquema de seguridad cuando ocurrió la balacera.
En el momento de los hechos, Rodríguez y su hija estaban ingresando a su vivienda personal, por lo que pudieron salir ilesos.
Antes del atentado, el director y su esquema habían detectado seguimientos nocturnos, movimientos sospechosos cerca a su residencia y presuntas chuzadas a su número celular.
Sobre esto último, el director también aseguró que a su celular le llegó un mensaje amenazante que decía “a usted también le caben balas”.
Comunicadora Social - Periodista de la UdeA. Amo leer historias y me formé para contarlas.