Esta edición del Festival de Música de Cartagena gira alrededor de los símbolos y los sonidos, esos que le enseñan a los oyentes la otra cara de la música, la que no se percibe inmediatamente. Por ejemplo, el violonchelista francés Gautier Capuçon tiene muy claro cómo hacer que las personas que lo escuchan se dejen llevar por lo que él siente, escucha e imagina cuando está sobre el escenario. Y, ayer en La Heroica, al lado del pianista Jean-Yves Thibaudet, lo dejó bastante claro; les recordó a los seguidores de la música por qué es uno de los mejores, más carismáticos y exuberantes intérpretes del mundo.
Antes de subir al escenario, Capuçon habló con EL COLOMBIANO sobre cuerdas, melodías y primeras veces.