El centrocampista brasileño Rafinha Alcántara podría perderse la temporada ya que, según el parte médico emitido por el Barcelona, “se confirma que tiene una rotura en el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha”, lo que le llevará al quirófano en los próximos días.
Rafinha se lesionó durante el partido contra la Roma, de la primera jornada de la Liga de Campeones, tras una entrada por detrás del belga Radja Nainggolan.
Después de entrar en el campo en el minuto 61 en la posición de Rakitic, Rafinha recibió una dura entrada a los pocos segundos por parte del belga, por la que tuvo que salir en camilla, y que obligó al Barcelona a realizar un nuevo cambio, en el que ingresó en el campo Javier Mascherano.
Al regresar a Barcelona con su equipo, el jugador visitó la Clínica Creu Blanca, donde se le realizaron pruebas que confirmaron la grave lesión, que ya intuía el entrenador, Luis Enrique Martínez, al finalizar el partido, cuando apuntó: “parece una lesión fea, muy fea, en la rodilla”.
El Barcelona se encuentra sancionado por la Fifa, y después de algunas consultas realizadas en la pretemporada, el organismo negó al club que pudiese contratar a un jugador en caso de grave lesión de alguno de sus futbolistas.
De esta manera, y si no cambia la posición de la máximo ente que rige el fútbol, el Barça perderá a un jugador importante hasta dentro de muchos meses y no podrá reemplazarlo con una nueva ficha.
El equipo catalán tiene a dos jugadores en lista para entrar en acción cuando se abra el período de fichaje de invierno, Arda Turam y Aleix Vidal, quienes no pueden jugar ni un minuto con el Barcelona, ni en partido amistoso, debido a la sanción de la Fifa con un año sin poder entrar en el mercado.
Rafinha se une a la larga lista de bajas en el Barcelona, en la que se encuentran Dani Alves, Thomas Vermealen, Douglas Pereira dos Santos y el portero chileno Claudio Bravo.
Real Madrid también se queda sin Bale
Gareth Bale, delantero internacional galés sufrió una lesión muscular, así quedó claro tras la resonancia magnética a la que fue sometido, tras caer lesionado el martes en el estreno en Liga de Campeones ante el Shakhtar Donetsk.
El Real Madrid no especifica la gravedad de la lesión muscular de Bale y en su parte médico señala que “tras las pruebas realizadas a Gareth Bale en el Hospital Universitario Sanitas La Moraleja se le ha diagnosticado una lesión muscular en el sóleo izquierdo” y que el galés está “pendiente de evolución”.
Pese a no especificarse la lesión muscular que sufre Bale, todo indica que es una rotura que, en función de su grado, tendrá un tiempo de baja de entre dos a cinco semanas.
El objetivo es que el galés esté recuperado para el derbi madrileño del Vicente Calderón ante el Atlético de Madrid del próximo 4 de octubre.
Se perdería los encuentros ante Granada, Athletic Club y Málaga en Liga, más la visita al Malmoe en la segunda jornada de Liga de Campeones.