Lionel Messi se convirtió en el seguro de vida del Barcelona en los últimos partidos, ya que sus tantos han permitido la victoria del conjunto catalán en el campo del Celtic (0-2) y el empate en Anoeta (1-1).
Alejado del campo del entrenamiento, aunque ha asistido a la Ciudad Deportiva -el club barcelonista no ha informado del estado médico del jugador-, ante Anoeta, Messi volvió a ser el único que no ha perdido el olfato goleador del tridente ‘MSN’, donde Neymar parece destacar más como pasador que como rematador y Luis Suárez se ha frenado en seco.
El argentino volverá a ser la apuesta para el clásico -que se jugará el fin de semana-, sobre el cual recaerán todos las esperanzas de un Barça que temporadas anteriores marcaba goles a placer y que ahora está encallado.
Aunque Messi sufrió golpes en el partido contra la Real, no parece que vaya a tener ningún inconveniente para estar en el Camp Nou el sábado contra el Real Madrid.
El Barcelona, que este lunes de dio alta médica a Arda Turan, informó de diversos problemas que ha tenido Jordi Alba en tobillo y rodilla, que lo colocan como duda en los próximos partidos.
Otro jugador que tampoco entrenó fue Gerard Piqué, como también sucedió en alguna sesión de la semana pasada. El central estuvo aquejado en San Sebastián de problemas en el tobillo derecho, que incluso requirieron asistencia desde la banda.
Dos jugadores que se esperan que pueden recibir el alta en breve son Samuel Umtiti y Andrés Iniesta. El francés, con una rotura fibrilar del bíceps femoral, es el que tiene más números para estar en la lista del sábado.
Por su parte, el capitán Andrés Iniesta, de baja desde el 22 de octubre en el partido Barcelona-Valencia, cuando tuvo lesión parcial del ligamento lateral externo de la rodilla derecha, también podría tener el alta, aunque con menos rodaje en los entrenamientos.