Dos colombianos, uno en la cancha y otro desde la tribuna, centraron este miércoles la atención de todos sus compatriotas amantes al fútbol.
Nadie se quería perder la final de la Liga Europa, que erigió como campeón al Eintracht Frankfurt, luego de vencer (5-4) al Glasgow Rangers, en lanzamientos desde el punto penal tras el empate (1-1) en la prórroga.
Como era de esperarse, Rafael Santos Borré integró la titular del equipo alemán, mientras que Alfredo Morelos tuvo que resignarse a ver este compromiso desde la gradería debido a que está lesionado desde abril pasado.
Lo anterior hizo que la mayoría de los aficionados colombianos que seguían a más 8.000 kilómetros de distancia el compromiso, a través de la pantalla del televisor, le hicieran fuerza al delantero barranquillero, pues esa sensación de ver a un compatriota salir campeón de un torneo de esta índole es similar a la de un logro propio.
El encuentro que se cumplió en el estadio Sánchez Pizjuán de Sevilla no generó muchas emociones entre los 43.883 presentes en el escenario deportivo, en particular en el primer tiempo. Antes de ingresar al recinto algunos de ellos se vieron inmiscuidos en una bochornosa pelea, en la que se lanzaron objetos contundentes de lado y lado. A la postre este fue el lunar de la jornada.
Respondió a las expectativa
En el terreno de juego, el representativo de Escocia pegó primero. Joe Aribo aprovechó un error de la defensa rival, se escapó de Tuta y sacó un disparo que se coló ajustado al palo (57’).
El panorama se ponía complicado para el conjunto alemán. Sin embargo, Borré estuvo a la altura que despertó tanto entre los seguidores de su equipo actual, como entre sus compatriotas.
De este modo, cuando corría el minuto 69, “El Comandante”, acorde a su apelativo, dijo presente. Luego de un centro de Filip Kostic, se coló entre los centrales, impactó el balón y despertó el júbilo tanto entre los simpatizantes de su equipo que estaban en el estadio, como en las esquinas de las ciudades colombianas, en donde sentados en una tienda o hasta parados seguían cada detalle del compromiso.
Ni los noventa y pico minutos reglamentarios ni la prórroga determinaron un ganador, por lo que el título se tuvo que definir desde el punto penal, instancia en la que de nuevo fue protagonista Rafael Santos Borré.
Kevin Trapp le atajó un cobro a Filip Kostic, por lo que parecía que la serie se podía definir de manera prematura. Sin embargo, el destino tenía predestinado que la figura de la jornada fuera Borré, quien con un certero cobro le dio al Frankfurt el título de la Liga Europa.
Ahora el pueblo colombiano espera por la final de la Liga de Campeones (28 de mayo), cuando seguramente vivirán similares emociones con la presencia de Luis Díaz.
Las palabras del campeón
Rafael Santos, quien alcanzó así el octavo título en su carrera deportiva y el primero en Europa, se mostró emocionado tras esta conquista.
“Siento mucha felicidad, mucha emoción, había soñado con esta noche, con una noche histórica para el club, una noche histórica para mí”, dijo a la plataforma Movistar tras el partido.
“Mi primer título europeo, creo que eso me llena de mucha felicidad, y ser importante para el equipo es muy lindo y me voy a quedar con este recuerdo para siempre”, dijo el colombiano, autor del tanto del empate y después del último penal de su equipo.
“No imaginaba esto, sabía que con mi experiencia con este tipo de competiciones que me gustan, sabía que podía ayudar al equipo, hoy se me dio y ahora a disfrutar”, añadió “El Camandante”