Después de varios días en que se habló sobre la continuidad de James Rodríguez en Brasil, el director técnico de Sao Paulo, Thiago Carpini, confirmó que el colombiano pidió salir del club en este mercado.
El entrenador hizo énfasis en que el equipo hizo lo posible por retenerlo y recuperar su nivel, pero fue el mismo James quien tomó la decisión: “Empezamos a cuidarla -la lesión- para que tuviera condiciones lo antes posible, pero es el propio interés del deportista. Ya no es asunto mío”.
Sin embargo, recalcó que no tiene nada en contra del cucuteño: “Nuestro período juntos fue corto, no tengo nada que decir sobre el deportista y el ser humano”.
El volante de 32 años ya habría llegado a un acuerdo con el club paulista para rescindir el contrato que tenía vigencia hasta 2025, pero deberá pagar una pequeña compensación a cambio.
¿Cuál sería su destino?
El equipo que más cerca estaría es el Besiktas de Turquía que, según el Diario AS, ya habría contactado a Jorge Mendes, representante del colombiano, para saber cuáles son las condiciones contractuales.
Por otra parte, parece que desde la MLS harían un esfuerzo por llevar a James a Estados Unidos. Se trata del Real Salt Lake y Columbus Crew, clubes que cuentan con otros compatriotas en plantilla y buscarían sumar uno más.