Independiente Medellín llegará en óptimas condiciones de salud y anímicas al partido por la fecha 10 de la Liga Betplay 1-2022, frente a Atlético Nacional, que se disputará este domingo a las 8:15 p.m. en el estadio Atanasio Girardot.
A falta del partido entre Once Caldas y Deportivo Pereira, que se enfrentaban anoche al cierre de esta edición, el conjunto antioqueño se ubicaba cuarto en la tabla de posiciones, con 15 puntos.
Si bien en condición de visitante sigue en deuda, pues aún no suma, las buenas presentaciones de local, donde el equipo tiene puntaje perfecto, han derivado en una comunión con los hinchas, que también se torna vital de cara al clásico antioqueño, en el que en el papel será visitante, pero seguramente tendrá un nutrido acompañamiento de su parcial.
Así las cosas, en la familia roja hay motivos de sobra para tener la moral en alto, pues a las cinco victorias en casa y la goleada (4-0) que le propinó a Águilas Doradas en el último juego, se le suma el hecho de tener el goleador del campeonato, Luciano Pons, que con siete tantos aparece en el primer lugar de la tabla de artilleros.
En lo médico también hay tranquilidad total. Víctor Moreno y Germán Gutiérrez, que terminaron con fatigas musculares el encuentro anterior, ya están bien.
Igualmente, el médico Édgar Méndez confirmó que “Miguel Camargo tuvo el alta desde el día lunes. Lleva cuatro días de trabajo con el grupo, haciendo acondicionamiento físico y futbolístico, y participando de los entrenamientos. También recibió el visto bueno Edwar López, que “tenía una disfunción patelofemoral (dolor en la parte delantera de la rodilla y alrededor de la rótula). Lleva 4 días haciendo trabajos sin ninguna clase de molestia y ya comenzó trabajos con todo el grupo”.
Otro de los casos que inquieta a la afición es el de Andrés Ricaurte, quien este semestre no alcanzó ni a terminar el primer partido, en el que tuvo que abandonar por una molestiar muscular.
El galeno confirmó que el mediocampista recibió el alta desde el pasado fin de semana y está en la última fase de trabajo con todo lo que tiene que ver con gesto técnico. “Lleva cinco días haciendo esa clase de trabajo y el objetivo se cumplió. Ya no siente ningún tipo de temor ni de tensión sobre la cicatriz y está sin restricciones”