Los orígenes del terciopelo se plantean en el lejano Oriente y según la Enciclopedia de la ropa y la moda es en el siglo XIV en donde comienza a mencionarse en cuanto a uso textil para el vestuario del día a día. En la antiguedad, el terciopelo era usado en los atuendos religiosos y en vestimentas reales.
Este material ha estado vigente en la moda, aunque tuvo una larga ausencia. No es sino que pregunte a las abuelas de su familia y con certeza le dirán que al menos tuvieron una prenda de terciopelo.
Como la moda es cíclica, este material regresó con toda la fuerza desde 2016 y quien haya pensado que era moda pasajera puede ir cambiando de opinión y añadir a su guardarropa una prenda de este material: es un imprescindible de la temporada 2017 - 2018.
Maité Cantero, coordinadora del Laboratorio de Moda de Inexmoda, explica que prendas hechas de terciopelo o velveteen se encuentran por todos lados.
“Las vemos con acabados craquelados, con grafías de flores, de animales. También en vestidos cortos y largos. Además buzos cortos como ombligueros o largos que parecen un vestido. También se va a ver en chaquetas y pantalones, del mismo color o en contraste de color y en faldas midi o cortas”.