Tras el combate que libraron los esprinter, en el que Marcel Kittel (Quick Step) hizo la fiesta al ganar ayer su tercera etapa, el Tour de Francia se reencuentra hoy y mañana con dos fracciones de alta montaña, al antojo de escarabajos y corredores explosivos, quienes podrían dinamitar la carrera y seleccionarla más de cara a las semanas que restan.
El pelotón se adentra en el macizo del Jura, una pequeña cadena montañosa que permitirá observar las estrategias de los favoritos al título.
Es la oportunidad para quienes pierden tiempo en la general respecto al líder Chris Froome (Sky), lo recuperen, entre ellos los colombianos Nairo Quintana (Movistar), Rigoberto Urán (Cannondale) y Esteban Chaves (Orica).
El desafío de hoy en la octava jornada será de 187.5 km de Dole a la Station des Rousses, con 3 ascensiones que van incrementando su grado de dificultad. Habrá tres premios (uno de tercera, otro segunda y el restante de primera categorías). Es la segunda vez que en esta prueba se asciende a Les Rousses. En 2010 Sylvain Chavanel ganó y se vistió de líder. ¿Los ataques de hoy fructificarán?
De lo contrario, mañana, en la jornada 9, los osados deportistas, en un trayecto rompepiernas de 181.5 km entre Nantua y Chambéry con siete ascensiones, intentarán sacar provecho. “Aunque el Tour es largo, aquí se empezaría a saber qué corredores podrían ocupar el podio. Este será el primer gran test”, dice Urán, 11° en la tabla a 1.01 de Froome.
El panorama del Tour se empezará a clarificar .