Desde la Universidad Nacional de Manizales, este grupo de estudiantes de Arquitectura vinieron a visitar la Bienal. Ellos quieren "inspiración", como bien lo dice Paula Patiño.
Por eso, en el segundo día de la Biau, se dedicaron a visitar Expoarquitectura, en el Pabellón Blanco, en el que se puede encontrar algo de la oferta comercial que le rodea, así como publicaciones, exposiciones y proyectos.
"Uno puede leer la historia de Colombia y de su arquitectura a través de las bienales", dice Jorge Pérez, coordinador de la Biau, quien agrega que en esta, hay 135 obras elegidas, aunque se presentaron más de 500.
Lo que habla de un consolidado de la cultura urbanística del país. "Como aparece lo más singular de Colombia, aquí se evidencia el avance en la gestión de las ciudades, a través de la arquitectura pública", agrega.
Lo cual no solo está en las principales urbes, sino que se extiende a otras zonas, y por ello, hay obras de San Andrés, Santa Marta, Tinjacá o Paipa, entre otros lugares.
Así, además de las obras privadas, se podrá ver lo que ha sucedido en colegios o bibliotecas, por citar algunos espacios.
Para reafirmar que Colombia se ha puesto en el mapa de la arquitectura mundial, el venezolano William Niño Araque dice que, en su concepto, tan solo en Medellín hay 20 obras que entran al catálogo de la mejor expresión arquitectónica del siglo XXI. Agrega que en la nueva generación de profesionales hay un talento notable, de distintas "narrativas".
Y sobre esta ciudad indica que al igual que otras urbes, como Madrid, ella es utilizada por sus habitantes a plenitud. Aquí, "el rol de la arquitectura fortalece la ciudadanía", añade.
Pico y Placa Medellín
viernes
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