El Día del Maestro ayer no fue para celebrar. Al contrario, los docentes marcharon en protesta en distintas ciudades del país, sumando así el segundo día de cese de actividades que impulsa la Federación Colombiana de Educadores (Fecode).
De acuerdo con las directivas de la federación, el Gobierno Nacional no ha dado respuestas que satisfagan las reivindicaciones y expectativas del gremio de los educadores colombianos.
Los maestros reclaman incremento salarial, mejores condiciones para el acceso al servicio de salud, mayor reconocimiento social, ajustes en horarios y la eliminación de las pruebas de competencias.
Para la ministra de Educación, María Fernanda Campo, el diálogo y los acuerdos se podrían dar en puntos de nivelación salarial promedio, mejora en el tema de salud, "pero lo que no se negociará será la eliminación de las evaluaciones a maestros. El país clama por la calidad educativa".
Y agregó: "Este paro no tiene ningún soporte ni ninguna justificación. Ya habíamos logrado un acuerdo que permitía mejorar de manera muy importante en términos de salud y económicas porque se inició un plan salarial de nuestros maestros".
El presidente de Fecode, Luis Gruber, aseguró que su gremio también será inflexible en ese punto, pues según ellos dichas evaluaciones no les permiten ascender y dificultan que los maestros suban el escalafón.
Se espera una nueva reunión entre la Ministra y los maestros, con miras a hallar una pronta solución, ya que cada jornada afecta a más de seis millones de niños escolares en todo el país.
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