El compromiso de Boyacá Chicó era el de conseguir los tres puntos que le permiten seguir con la ilusión de seguir peleando un cupo en los cuadrangulares.
Al cabo de los 90 minutos y sin demostrar los mejor de su repertorio, la escuadra ajedrezada consigue un 2-1 que aunque se vea ‘cortico’ se logra ante un Atlético Huila que cambia sustancialmente en el segundo tiempo en que muestra méritos suficientes para llegar al empate.
Precisión y efectividad fueron los aspectos que marcaron el destino de la primera parte en la que Boyacá Chicó demostró eficacia a la hora de marcar en el arco contrario.
Un local que tuvo licencia para administrar el balón por intermedio de Edwin Móvil, Diego Chica y Juan Alejandro Mahecha, quienes manejaron los tiempos y los ritmos del compromiso.
Por su parte, el Huila logra mostrar algunos destellos en los primeros 10 minutos y luego el equipo se esfuma y pierde el control de la pelota que alcanza a tener en ese lapso con el volante de enlace Maller Tresor Moreno.
Importante la forma como el local ha buscado la apertura de los costados con Andrés Felipe Sarmiento y Luis Alberto Núñez, quienes subieron y sumaron a la ofensiva las veces que quisieron.
El conjunto a cuadros cobra por ventanilla los costosos errores del portero Carlos Abella, quien fue protagonista para que el juego se desequilibrara. Fue así como al minuto 15 Juan David Pèrez hace la apertura de la pizarra.
Jugada que nace en un remate de media distancia de Móvil que pega en un zaguero y oportuno el ariete cordobés la acomode sobre el bajante derecho y pone celebrar a la parcial boyacense.
El gol se constituye en un bálsamo para Boyacá que se abalanza por completo sobre su rival, que no encuentra la forma de controlar los constantes ofensivos
A los 29 minutos, llega el segundo tanto del local a través del espigado defensor central Julián Carabalí, quien aprovecha una asistencia desde la derecha de Pérez, quien toma en contra pierna a la defensa amarilla.
En la jugada previa aparece como gran protagonista el meta Abella, quien comete dos errores sucesivos que son bien aprovechados por la escuadra del altiplano para irse cómodo arriba en el marcador.
Y después un centro desde la derecha de Pérez, que toma en contra pierna a la defensa y aparece Carabalí quien sólo tiene que empujarla. El Huila llega al minuto 40, en su primera incursión a la portería de Héctor Fabio Landázuri, con un remate de fuera del área que pega en un defensa y se va al tiro de esquina.
Luego es de nuevo Pérez quien saca un potente disparo que suelta, de forma increíble, Abella pero en una rápida reacción logra controlar en dos tiempos cuando Mahecha se alistaba para el remate.
Y en los segundos finales, Huila aprieta el acelerado y por intermedio de Cristian Cangá, quien se resbala en el preciso momento en que le remojaba las barbas al arquero Landázuri.
Tan pronto reinicia el juego, el entrenador Álvaro de Jesús Gómez recompone su onceno con el ingreso del atacante César Valoyes y del centrocampista venezolano Armando Maitá, situación que le permite darle más profundidad en el frente de ataque.
Y, precisamente, en la primera llegada con peligro del conjunto opita, a los 57 minutos, logra el descuento a través del juego aéreo con un certero golpe de cabeza de Camilo Mancilla, quien libre de marca la acomoda en el centro del arco.
A los 67 minutos, el lateral izquierdo en un soberbio remate de media distancia obliga a una sensacional atajada de Abella que evita la caída de su pórtico.
El compromiso entra en una fase en la que Boyacá espera en su propio terreno, le entrega parte del terreno y Huila copa los espacios con el fin de apretar al contrario con pelotazos al área y se busca las diagonales de los que recién habían ingresado.
Sin duda, las variantes de estratega Gómez dan los frutos esperados, con un cuadro foráneo que se ve más compacto y con Moreno y Dayron Pérez que se convierten en los hombres de las ideas.
El plantel a cuadros logra controlar el ímpetu ofensivo siendo ordenado en la zaga y con hombres de ida y vuelta como Mahecha y Chica quienes se convierten en auténticos bastiones en mitad de campo.
Al final, algunas aproximaciones de Huila que no tienen buen destino debido a la ansiedad que se refleja en los jugadores por el deseo vehemente de empatar y un Boyacá Chicó que tuvo espacio para contra atacar pero que les faltó tranquilidad para concretar.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6