Por lo menos cuatro niños murieron y dos resultaron heridos por la detonación este viernes de un artefacto explosivo en el distrito de Nahri Sarraj, en la provincia meridional afgana de Helmand, informó la oficina de prensa de Estados Unidos en Afganistán.
El servicio médico de la misión de la Otan en Afganistán (Isaf) se hizo cargo de los menores heridos, de acuerdo con un comunicado, aunque en el mismo no se proporcionaron más detalles sobre lo sucedido.
Las bombas camineras (en inglés, IED) y los ataques suicidas son los métodos más utilizados por los insurgentes talibanes en sus campañas contra la misión de la Otan en el país, pero en la práctica causan un elevado número de víctimas civiles.
Según la misión de Naciones Unidas en Afganistán (Unama), el 77 por ciento de los 3.021 civiles muertos en 2011 por la guerra fallecieron en acciones imputables a los talibanes.