Hay quienes pasan sus documentos de un PC a su móvil, como en un juego de ping pong, solo para visualizarlos. "Jamás para escribir, me sofoca el mini Qwerty virtual", dice la periodista guatemalteca Claudia Cruz.
Sin embargo, a pesar del estrecho margen de un teclado en un teléfono inteligente, o peor aún, en una tableta, cuando se activa el virtual, el hecho de tener un archivo a la mano se impone.
El ingeniero informático Hernán Guzmán Rendón utiliza Google Docs para visualizar y editar archivos entre su PC y su Android. Cree que la experiencia es limitada, claro.
Lo que se nota, en especial, es "en la facilidad de aplicar formatos, insertar imágenes y la comodidad para escribir, que varía de un equipo a otro", añade.
Sin embargo, estas limitaciones se opacan a la hora de sacarle el máximo provecho a la herramienta: cuando se comparten archivos que se editan de forma simultánea.
En esto concuerda Jorge Soto, director de SeñorK.com, quien cree que el hecho de compartir y editar en tiempo real, viendo lo que el otro cambia implica hasta "un cambio cultural" en empresas que adoptan el modelo de trabajo colaborativo e información en la nube.
Soto hace la diferencia entre servicios como DROP box, que sirven para sincronizar archivos entre varios computadores o dispositivos, pero a la hora de editar hay que tener los programas asociados e instalados para hacerlo.
En Google Docs se editan en la nube con solo tener una conexión a internet y un explorador. Cree que como todo "producto en desarrollo" tiene limitaciones, en especial en el caso de hojas de cálculo.
Lina Guisao, por su parte, utiliza la edición Premium (es decir: paga) de Documents to go y hace el emparejamiento del dispositivo a través de DROP box.
Un método que utiliza en reuniones, cuando toma nota en un archivo que debe enviar para que otros perfeccionen y entre todos dejen listo. "Esto evita que tenga que enviarme al correo electrónico cada que el documento tiene una modificación ya sea en el teléfono inteligente o en el PC. Solo tengo que recurrir a la carpeta para ver los cambios y listo", agrega.
Una posibilidad que le ha salvado en el último minuto. Recuerda que en un taxi alcanzó a corregir los últimos detalles de su tesis de grado en Ciencias Políticas, y a la llegada a la universidad lo tenía listo y unificado.
No es solo tenerlo a disposición a donde vaya, sino poderlo modificar. He ahí la bondad.
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