Una semana de ensueño vivió Luis Amaranto Perea en Argentina gracias a la compañía de sus hijos Juan David y Daniel y de su esposa Digna Luz Murillo. Le toca el corazón su partida este martes hacia España, pero queda tranquilo porque la motivación le brindaron le sirvió para mostrar un buen rendimiento en la Selección de Colombia.
Mientras él se entrenaba en la cancha del Club Unión, Juan David y Daniel movían el balón en las graderías jugando su propio partido, porque el primero y mayorcito es hincha del Boca Juniors y el segundo se inclina por el Atlético de Madrid.
"Ahí donde los ve son muy buenos, de la misma o mejor calidad del papá" chicaneó Digna Luz, luego de confesar que "de manera obligada me tocó a aprender a mirar el fútbol, porque tengo tres jugadores en casa y no había más de otra".
Hubo un rato en el que Juan intentó desconcentrar a su papi haciéndole señas para que le recuperara la pelota que se le había ido al pozo, pero el central del combinado patrio le hizo una señal mágica con su mirada para que él acudiera a donde Digna Luz.
Fue ella quien dijo "nosotros vinimos fue a darle ánimo por lo motivante que es para cualquier deportista tener los suyos al lado, más cuando somos tan unidos; estamos felices por el apoyo que le brindamos y la manera como él y sus demás compañeros estan respondiendo".
Juan David la interrumpió agregándole "no se olvide mami que Colombia juega bien y con papá llegará a la final de la Copa". Su hermanito Daniel sonrío y dijo que "creo lo mismo, pero no sé por qué". Igual respondió al preguntársele por qué seguía al Atlético y tenía nacionalidad española.
Sin perder su profesionalismo, pero dejando ver la tristeza que genera ver partir otra vez a sus seres queridos, Luis Amaranto admitió este lunes que "por suerte ellos tres estuvieron acá y nos respaldaron con su cariño, comprensión y compañía".
También preguntó públicamente ¿a quién más puede acudir uno en las buenas, las malas y regulares actuaciones? Y el mismo se respondió "a su familia, pues esas personas siempre están contigo sin importar lo demás".
Con toda la razón del mundo, pero con un gran pesar, Perea tendrá que decirle adiós este martes a Juan David, Daniel y Digna Luz. Los chicos volverán a los entrenamientos del semillero del Atlético (el primero es lateral y el segundo delantero) y la antioqueña deberá retomar la preparación para buscar la marca mínima que la lleve al Mundial de atletismo.
Digna Luz, quien recordó que en su casa sobra la velocidad y tanto ella como su esposo se retroalimentan de sus profesiones, volará tranquila con sus hijos a Madrid por dos cosas.
La primera es el "buen momento que le veo a la Selección de Colombia" y la segunda tiene que ver con "mi conciencia limpia, pues alguien por el afán de sacar noticias intentó afectarme por haber saludado una persona del deporte, pero gracias a Dios no lo logró y la próxima semana continuaré entrenando con España para el Mundial de atletismo".