Quince personas murieron por las inundaciones provocadas por las fuertes lluvias registradas el martes en el departamento francés de Var, al sureste del país, según el último balance de la prefectura (delegación del gobierno).
La mayoría de las víctimas fallecieron en la localidad de Draguignan, un total de ocho personas, y se registraron también cuatro muertes en Trans-en-Provence, una en Roquebrune-sur-Argens, otra en Le Luc y otra más en Fréjus.
En esta última localidad fueron evacuadas por lo menos 1.300 personas, entre ellas muchos turistas que estaban alojados en los cámpings de la zona, según dijo a Efe un portavoz del Ayuntamiento de Fréjus, que dijo desconocer durante cuánto tiempo tendría que permanecer en centros de acogida.
En la zona más afectada, entre Saint-Tropez y Draguigan, se registraron, desde la noche del lunes y el martes, entre 200 y 300 litros de agua por metro cuadrado y se alcanzaron los 350 litros en algunos puntos, unas cantidades que suelen recogerse en varios meses de precipitaciones, según indicó la agencia meteorológica Météo France.
El temporal se desplaza hacia el Atlántico por los Pirineos y se activó la alerta naranja por fuertes lluvias en dos departamentos fronterizos con España: Pyrénées-Atlantiques y Midi-Pyrénées.
En el Var, se instalaron dos capillas ardientes en los hospitales de Draguignan y Fréjus y se ha activado un servicio específico de ayuda psicológica en el centro hospitalario de Toulon.
El aeropuerto de Hyères-Toulon y la autopista A8 vuelven a estar operativos tras la clausura por el temporal, mientras que la línea de tren entre Niza y Toulon continúa interrumpida.
En Draguigan los centros escolares no abrieron este miércoles.
La prefectura advierte que debido a los cortes de suministros eléctrico provocados por el temporal, pueden registrarse complicaciones en la red de agua potable en las próximas 24 a 48 horas.