La caída en los precios de los alimentos, del 0,60 por ciento en junio, fue el principal factor estimulante de la reducción del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que cerró en este mes con un comportamiento negativo, del 0,06 por ciento, por primera vez en muchos años, según informó el Dane.
El organismo indicó que la inflación del primer semestre de 2009 fue del 2,22 por ciento (inferior en 3,80 por ciento del primer semestre de 2008, cuando fue del 6,02 por ciento) y el acumulado anual -frente a julio de 2008-, fue del 3,81 por ciento. En mayo había sido del 0,01 por ciento y el acumulado anual llegaba al 4,77 por ciento.
Bajaron los alimentos
La reducción de los precios de los alimentos, en el 0,60 por ciento, fue el factor jalonador de la caída de la inflación, especialmente los tubérculos y plátanos (-9,98 por ciento), frutas (-2.39 por ciento) y los cereales y productos de panadería (-2,23 por ciento). Otros rubros, como transporte y comunicaciones, también cayeron (en -0,03 y -0,06 por ciento), mientras que los otros gastos y rubros de la canasta familiar mostraron crecimiento.
En Medellín, la tasa de inflación mostró un nivel negativo en junio, del 0,14 por ciento, mientras que en Pasto fue donde más bajó (-0,53 por ciento). Bogotá fue la tercera ciudad con mayor crecimiento de los precios (0,07 por ciento), detrás de Neiva (0,22 por ciento) y Florencia (0,13 por ciento).
¿Hacia menores tasas?
Entonces, cobra vigencia la proyección de la Junta del Banco de la República, en el sentido de que la inflación terminará el año por debajo del rango medio de la meta (5,0 por ciento) y que habría más espacio para mantener la tendencia de reducción de las tasas de interés.
Hace poco el codirector Carlos Gustavo Cano, destacaba en esta ciudad que la tasa de inflación seguirá cediendo y se situará en el 4 por ciento al final de este año. Con ello, dejaba entrever que, de continuar la tendencia, habría más espacio para continuar con la reducción de las tasas de interés de referencia para estimular el uso del crédito y la reactivación de la demanda, como lo ha reclamado el mercado.
El resultado de junio contrasta con las proyecciones de los analistas, que estimaban un aumento de la expectativas de inflación. No obstante, las minutas de las reuniones de la junta del Emisor, divulgadas el viernes, llamaban a la cautela en materia de política monetaria.
La última reducción de las tasas de interés de referencia fue el pasado 19 de junio, cuando bajaron de 5,0 por ciento al 4,5 por ciento, al conocerse la inflación en mayo, del 0,01 por ciento (caída por séptimo mes consecutivo) y del 4,77 por ciento en el acumulado anual.
La Junta del banco central revisará los datos de la inflación de junio en la reunión del próximo 24 de julio.
Pico y Placa Medellín
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3 y 4
