La entrega de los premios Grammy Latino, la semana pasada en Las Vegas, confirmó que la música de nuestro hemisferio tiene mucho para cantar y contar...
Y que se aborda desde múltiples géneros para hacerse sentir como factor definitivo en la cultura de la región, pasando por cumbia, vallenato, música religiosa y las variedades de los ritmos mexicanos.
Prueba de ello son los tres gramófonos obtenidos por músicos colombianos.
Uno para Carlos Vives, como productor de Pombo musical, con el que ganó el Mejor álbum de música latina para niños.
El segundo que suman Peter Manjarrés y Sergio Luis Rodríguez, con el Mejor álbum de cumbia/vallenato: El caballero.
Y por último, Mejor canción tropical: Yo no sé mañana , para el ex integrante de Bacilos Jorge Villamizar por la composición de este tema para Luis Enrique.
Si bien eran más los nominados, como el caso de Andrés Cepeda, es satisfactorio ver más allá de nuestras fronteras y valorar el espacio que esta ceremonia ha ganado en los últimos años. La convocatoria, el número de nominados y las categorías, han demostrado en los Grammy como en los premios MTV, que es indispensable que en este tipo de galardones se hable español.
Necesitamos vernos y reconocernos en este tipo de encuentros.
Merece mención aparte el grupo de Puerto Rico Calle 13, que fue el grupo ganador de la noche con cinco Grammy.
Se consolida como una suerte de voz de protesta social y alto contenido político, en la que también se oyen cantos de orgullo al barrio, a la calle, a los amores, a los amigos...
Y se le abona a Residente, vocalista y rostro visible de la agrupación, la actitud de reconciliación hacia Colombia, por las molestias suscitadas por la camiseta que lució en los MTV hace varias semanas.
Que la música nuestra, esa que sabe a barrio y a pueblo, siga sonando muy fuerte.
Pico y Placa Medellín
viernes
3 y 4
3 y 4
