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HISTÓRICO
'Los Triana' y su red de policías y comerciantes
  • Fotos Cortesía Policía Archivo | Carlos Mario Triana Vásquez, alias "Mario Chiquito" o "Gordo Chiquito" (foto arriba derecha) podría ser extraditado a España. Había salido de la Cárcel de Palogordo, en Girón, Santander, en marzo pasado, tras purgar una pena por concierto para delinquir. Según la Fiscalía, el teniente Jonny Esneider Villegas (foto derecha abajo) presuntamente le colaraba a la organización.
    Fotos Cortesía Policía Archivo | Carlos Mario Triana Vásquez, alias "Mario Chiquito" o "Gordo Chiquito" (foto arriba derecha) podría ser extraditado a España. Había salido de la Cárcel de Palogordo, en Girón, Santander, en marzo pasado, tras purgar una pena por concierto para delinquir. Según la Fiscalía, el teniente Jonny Esneider Villegas (foto derecha abajo) presuntamente le colaraba a la organización.
Investigaciones El Colombiano | Publicado

El destino de los hermanos Osorio -tres comerciantes jóvenes y acaudalados de Medellín- comenzó a enturbiarse el 20 de diciembre de 2009, por cuenta de un agente de la DEA.

Hasta ese día, Juan Pablo, Josué Fabio y Jaime Arturo Osorio Osorio, propietarios y mayores accionistas de la firma Jaigás Ltda., no figuraban en el mapa delincuencial de Medellín.

El informe de la DEA advertía a las autoridades colombianas sobre el funcionamiento de un laboratorio de cocaína instalado en plena zona residencial del barrio La América de Medellín.

Según el documento, el cristalizadero estaba a cargo de dos hombres conocidos con los alias de "Marroco" y "Roger", quienes a su vez recibían órdenes de tres personajes: "Matute", "Chepe" y "Palito".

Ni siquiera la Policía tenía conocimiento de que al parecer estos últimos apodos correspondían, en su orden, a Juan Pablo, Josué Fabio y Jaime Arturo.

También ignoraban las autoridades que desde ese domicilio, ubicado en la calle 44 No. 92-91, se distribuía droga no solo a destinos locales como barrio Antioquia, San Antonio de Prado, La Estrella, Caldas e Itagüí, sino que desde allí se exportaba cocaína a Europa y Centroamérica.

Pero la ecuación pareció despejarse cuando la Fiscalía General de la Nación, mediante orden judicial, comenzó a interceptar teléfonos y a seguir a quiénes entraban y salían a diario de lo que en apariencia era una bodega donde se fabricaban instalaciones de gas.

En varias oportunidades, según la Fiscalía, se vio llegar a Juan Pablo Osorio abordo de diferentes vehículos, entre los que estaban dos Toyota Prado, un Chevrolet Corsa y hasta un vehículo con las insignias (no se establece si plagiadas) de las Empresas Públicas de Medellín (EPM).

Fue así como el 17 de junio de 2010 se ejecutó el allanamiento. El procedimiento requirió forcejeo de cerradura.

Eran cuatro habitaciones con circuito cerrado de televisión -consigna el informe- en las que efectivamente se encontraron compresores y materiales industriales de gas.

Pero también la droga. En total, se decomisaron 23 kilos de base de coca y otra tanta cantidad de clorhidrato. Pero más allá de lo que ya había vaticinado el informe de la DEA, fue el contenido de una caja fuerte de color verde claro el que terminó por descubrir la médula de toda la estructura criminal.

Según el expediente, bajo llave había varios manuscritos con informaciones de fosas comunes, direcciones de casinos, panfletos de las Águilas Negras, hojas de contabilidad y un escrito de acusación emitido por la Fiscalía.

A la vez, se halló la copia de una carta firmada por Daniel Alejandro Serna, alias "Kener" (desmovilizado y miembro de una facción de la llamada 'Oficina') en la que intentaba dirigirse, por su cuenta, al expresidente Álvaro Uribe Vélez.

En una de las hojas manuscritas había una lista de personas reseñadas como "tíos", beneficiarios del pago de una nómina mensual. Es en este aparte en el que entran a figurar varios policías, arguye quien dirigió la investigación.

En una llamada interceptada el 21 de junio de 2010 a las 21:31 de la noche, Chepe (quien al parecer es Josué Fabio Ososio Osorio) le dice a un señor de nombre Leonardo que "se nos cayó la estantería, pero que afortunadamente ni a 'Palito' (Jaime Arturo) ni a 'Matute' (Juan Pablo) ni a mi nos pasó nada".

Más de una veintena de audios también comprometen a los hermanos Osorio con Walter Luciano Londoño Cortinez, alias "Lobo", a quien se escucha planear homicidios en zonas como San Antonio de Prado y el municipio de Caldas. Es así como la Fiscalía anexó a la investigación muertes como la de los hermanos Mauricio y Carlos Andrés Ospina Restrepo, la de Weimar Alexis Acevedo Marín, la de Estefanía Durango Henao y otros tantos crímenes.

Más que una banda, esta organización se asemejaba a una red cuya cabeza era Carlos Mario Triana Vásquez (nacido el 3 de abril de 1974), miembro del temido clan que durante más de 20 años ha visto entrar y salir a sus jefes de prisión.

En total eran cerca de 40 personas (20 fueron capturadas la semana pasada), entre las que aparecen cinco policías. Uno de ellos es el oficial Jonny Esneider Villegas Arenas, quien hasta finales del año pasado se desempeñaba como comandante de la Estación del municipio de Caldas.

Villegas, quien estaba a punto de ser ascendido al grado de capitán, registra en su hoja de vida una suspensión y varias anotaciones disciplinarias.

En una conversación del 13 de septiembre de 2010, a las 11:07 a.m., alias "Lobo" le dice a otro hombre que al Teniente le dieron 10 millones de pesos "por averiguar una cosita".

El mismo Villegas le envía varios mensajes de texto a "Lobo" en los que le reclama el dinero para "pagar los servicios". El 3 de julio, Villegas le escribe: "Niño, ¿cómo va lo mío?".

Los otros cuatro uniformados detenidos tienen el rango de patrulleros y subintendentes. Por las conversaciones telefónicas de cada uno de ellos, la Fiscalía supo que recibían 400 mil pesos quincenales, sin contar los "aparaticos", que no es otra cosa que teléfonos BlackBerry que proporcionaban los mismos presuntos delincuentes.

Osorio es dueño de una mina
Pero, ¿qué se sabía de los hermanos Osorio antes de su captura? La empresa Jaigás Ltda. fue constituida mediante escritura pública el 10 de abril del año 2003, y tiene por objeto social "realizar instalaciones industriales y residenciales de gas, así como la representación de casas nacionales y extranjeras".

Jaime Arturo, identificado con cédula No. 71'733.752 aparece, a su vez, como beneficiario de un título minero en el municipio de San Jerónimo. Según el expediente 5488 de la Gobernación de Antioquia, a Osorio le fue expedida una licencia de exploración (en la modalidad de concesión minera) que data del año 1997.

El permiso se explica, según la abogada Claudia Arias de la Gobernación, si se tiene en cuenta que para la aprobación solo se requieren antecedentes de carácter fiscal emitidos por la Contraloría y la Procuraduría. "La persona, mientras no esté inhabilitada o condenada mediante sentencia, puede contratar con el Estado", dice.

Pero si bien Jaime Arturo estaba limpio en su historial, Josué Fabio ya tenía un antecedente. Este hombre, nacido en mayo de 1974, había estado involucrado en el robo de un banco en Medellín, ocurrido a las 2:00 de la tarde del 18 de julio de 1997, y en el cual resultaron muertos un asaltante y un policía.

La mujer que ejecutó el robo indicó en su momento que "Josué Fabio y Jaime Arturo Osorio Osorio fueron los encargados de planear el hecho y contactar a los ejecutores materiales", según se lee en el proceso que llegó hasta la instancia de casación en la Corte Suprema de Justicia.

Al final, solo Josué Fabio fue condenado en calidad de cómplice, por delitos contra el patrimonio público. El mismo hombre que tras el allanamiento de junio del año pasado dijo "se nos cayó la estantería".

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