Un de las quejas más comunes de los vecinos durante diciembre es la molestia que causan las reuniones sociales hasta altas horas de la noche y, algunas veces hasta entrada la madrugada, que se realizan en casas, apartamentos y salones de unidades residenciales.
Si bien Navidad es una época para disfrutar de la familia y los amigos, los horarios de sueño y tranquilidad de las personas son sagrados. No se puede, en el afán de pasar un buen rato, perturbar el descanso de los vecinos con equipos de sonido estridentes y mucho menos con pólvora. Que sea esta la oportunidad para ser más prudentes y considerados.
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