Bolivia necesita la ayuda de toda la comunidad internacional, pero las últimas decisiones tomadas por el presidente Evo Morales tienen un tufillo de conveniencia, y para quedar bien con Chávez, cuyos daños los recibirán los pobres.
El retiro de la DEA de Bolivia y el efecto colateral que tomó Estados Unidos de no prorrogar las preferencias arancelarias en ese país andino afectarán la incipiente economía boliviana, pues se perderán unos US$157 millones, vía aranceles. Bolivia no supera su polarización política y ahora su economía recibe un golpe peligroso.
Pico y Placa Medellín
viernes
3 y 4
3 y 4