El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunirá este lunes con su par mexicano Andrés Manuel López Obrador para dialogar sobre la incesante migración ilegal y el tráfico de fentanilo, dos crisis sin solución a corto plazo.
López Obrador adelantó que durante el encuentro en Ciudad de México planteará a Biden la necesidad de aumentar la inversión en los países de donde salen las personas indocumentadas. “Coincidimos” en ese aspecto, dijo el mandatario en su conferencia diaria, al señalar que comentó el tema con Biden tras recibirlo el domingo.
Pero no está previsto que Biden anuncie nuevas medidas luego del programa lanzado el pasado jueves que autoriza el ingreso mensual de 30.000 venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos durante dos años. Dicho plan fue concertado con México.
“Para el final de esta cumbre no vamos a tener un nuevo acuerdo”, declaró a periodistas el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, quien acompaña a Biden. Sin embargo, “no hay razón para creer que no habrá un tercer paso en algún momento”, añadió Sullivan, aludiendo a otra medida que beneficia a venezolanos.
Tras su arribo a México, Biden remarcó en Twitter que los “problemas en la frontera (...) no se resolverán de la noche a la mañana”.
Agregó que su gobierno está utilizando las herramientas disponibles para “limitar la migración ilegal” y “ampliar la legalidad”, pero enfatizó que para componer este sistema “roto” el Congreso estadounidense “debe actuar”.
Biden y AMLO tenían previsto su encuentro para las 5 de la tarde hora local en el palacio presidencial, un día antes de celebrar la Cumbre de América del Norte junto con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, quien llegó este lunes a la capital mexicana.
Los tres líderes condenaron este lunes los “ataques contra la democracia” en Brasil, tras el asalto el domingo a las sedes de los poderes públicos por parte de seguidores del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro, según un comunicado conjunto.