En México se respiraba desazón y temor entre el martes y ayer, durante el conteo de unas elecciones que dejaron perplejo a medio mundo y tras ver a Trump llegar al máximo cargo de la potencia estadounidense, contra casi todo pronóstico. Las portadas de prensa de la superpoblada capital mexicana así lo evidenciaron.
“A temblar”, titulaba ayer el diario Excélsior para describir el sentimiento de la opinión pública del país, donde el pesimismo late en todos los comentarios expresados por políticos, expertos y ciudadanos.
Mejor titular no tendría lo ocurrido en Estados Unidos para el mundo, puesto que no solo la vecina México tiene motivos para temer las consecuencias de este suceso histórico. ¿Qué efectos dejará en el mundo el viraje hacia el populismo de Trump?
Legado irreversible
De hecho, los asuntos que podrían parecer más delicados en principio, serían los que Obama utilizó para realizar cambios históricos en la forma como EE. UU. se relaciona con el mundo: Cuba e Irán, fundamentalmente. ¿Se verán afectados esos procesos de deshielo y diplomacia? Para Mauricio Jaramillo Jassir, docente de la Facultad de Relaciones Internacionales de la Universidad del Rosario, dichos procesos tienen muchos aspectos irreversibles.
“El triángulo presidente, empresarios y senadores que impulsó el deshielo con Cuba va a ser muy difícil de revertir. Además, durante la campaña estadounidense se trató muy poco el tema de la isla, por lo que no creería que Trump vaya a hacer presión en ese asunto. Por su parte, Irán es un caso similar, e incluso depende también de Europa, por lo que será muy difícil desmontar el proceso”, vaticinó.
Para el experto, en cambio, los aspectos preocupantes que podrían sacarse de este nuevo escenario en Estados Unidos es lo que puede ocurrir en Medio Oriente.
“EE. UU. es clave en la reconstrucción de Irak, en la contención del Estado Islámico en Siria, y en cualquier relanzamiento del proceso de paz entre Israel y Palestina. Esa región sufriría en un escenario en que la potencia entre en una especie de introspectiva. Habrá que ver como va a reaccionar el Congreso y los republicanos”, argumentó.
De hecho, el mayor efecto negativo ya estaría dándose no en el mundo, sino en el propio Estados Unidos, afectado en su imagen internacional: “es muy difícil que esto no tenga un impacto adverso sobre un país que a lo largo de todo el Siglo XX se ha mostrado defensor de los derechos humanos, del individuo, de las minorías, de los negros, de la igualdad de genero. Ahí hay un perjuicio a su imagen. Por ejemplo EE. UU. ha tenido siempre una fuerte moral para criticar a los populistas en América Latina, pero hoy la llegada de Trump al poder significa que cayeron también en eso. Van a perder protagonismo internacional, concretamente en Medio Oriente, América Latina y el Noreste Asiático”.
Por último, en medio de todas las coyunturas que dudan frente al nuevo mandatario, ¿le importará a este entorpecer el proceso de paz colombiano? Para Jaramillo, “el apoyo es bipartidista en el Senado. Republicanos y demócratas respaldan por igual, y eso es suficiente impulso para que no haya efectos adversos contra dicho asunto”.