viernes
7 y 9
7 y 9
Estados Unidos lanzó este jueves un vigoroso bombardeo contra objetivos en Siria, en el que utilizó por lo menos 50 misiles teleguiados, en respuesta a un ataque con armas químicas por el que responsabilizó al líder sirio Bashar al Asad.
Una fuente del Pentágono informó que 50 misiles Tomahawk fueron lanzados desde buques de guerra contra la base aérea siria de Shayrat, desde donde Estados Unidos piensa que partió el ataque con arma química.
En tanto, una fuente de la Casa Blanca que solicitó el anonimato acusó directamente al gobierno de Asad por la utilización de un arma basada en un gas neurotóxico contra una aldea en el noroeste del país.
Lea aquí: Trump dice que ataque químico en Siria es una “afrenta a la humanidad”
“Para ese ataque, el régimen de al Asad utilizó un agente neurotóxico que tiene las características del sarín”, dijo la fuente. Peritos de Turquía que atendieron a víctimas del ataque habían afirmado que el gas utilizado era sarín.
Por eso, para Trump, el ataque es “vital para la seguridad nacional”. “Todos los países civilizados deberían contribuir al fin del conflicto en Siria”, dijo el Presidente de Estados Unidos.
Este mismo jueves, en la sede de las Naciones Unidas, el Consejo de Seguridad no logró alcanzar un acuerdo sobre una declaración sobre el ataque con arma química en Siria, cuando ya se había divulgado la información de que la Casa Blanca tenía listo un plan de ataque.
Al fin de esa reunión, el embajador de Rusia, Vladimir Safronkov, había advertido sobre los riesgos de un ataque estadounidense contra objetivos en Siria.
Esta semana publicamos: ¿Cambiará Trump el enfoque de EE. UU. en la guerra de Siria?
“Si hay una acción militar, toda la responsabilidad recaerá sobre los que hayan iniciado una empresa tan trágica y dudosa”, expresó el diplomático ruso a la salida de la reunión.
El ataque de este jueves representa un claro giro en la política estadounidense hacia Siria. Hace apenas una semana, altos funcionarios estadounidenses, incluyendo la embajadora ante la ONU, habían declarado que la salida de al Asad del poder no estaba entre las “prioridades” de Washington.
Esta fue la zona bombardeada por los misiles estadounidenses:
El gobierno de Siria confirmó que en efecto hubo un ataque aéreo en la localidad de Jan Sheijoun, pero aseguró que no se usaron armas químicas y que el bombardeo fue dirigido contra un almacén de armas de los grupos rebeldes que tienen el control de la zona.
Lea aquí: Rusia ya sabía que Estados Unidos iba a atacar a Siria
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, respaldó a al Asad y sugirió que el gas venenoso, que mató a más de 80 personas, se filtró desde el depósito de armas químicas que fue bombardeado por el gobierno sirio.
El comandante del grupo rebelde Ejército Libre de Idlib, Hasan Haj Ali, desmintió la versión de Putin y afirmó a la agencia Reuters que “todos vieron el avión cuando estaban bombardeando con gas”.
Lea también: Así reaccionaron los congresistas de EE. UU. al ataque de Trump contra Siria
“De igual modo, todos los civiles en el área saben que no hay posiciones militares ahí, o lugares para la manufactura (de armas). Las varias facciones de la oposición no son capaces de producir estas sustancias”, dijo Haj Ali.