En la ciudad de Asís –lugar natal del santo que inspiró su nombre pontificio– el Papa Francisco dijo ante una multitud de jóvenes economistas y empresarios que es necesario “cuestionar el modelo de desarrollo” actual porque “la tierra arde hoy”. El discurso del líder máximo de la Iglesia Católica –que viajó en helicóptero desde el Vaticano– se dio en el marco de la conferencia “La economía de Francisco”.
A pesar de los continuos rumores de una posible renuncia al solio de San Pedro, Francisco asistió al evento con la expresa intención de hacer hincapié en su llamado de poner a los pobres en el centro de las acciones políticas y económicas del mundo: “una economía de Francisco no puede limitarse a trabajar para o con los pobres. Mientras nuestro sistema produzca residuos y funcionemos según este sistema, seremos cómplices de una economía que mata”, dijo, haciendo alusión al fundador de la orden de los frailes menores.