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En Medellín marcharon por la paz y en los barrios populares cerraron el comercio
Cerca de 3.000 personas entre jóvenes, madres, líderes y miembros de combos marcharon; hace una semana se cuadró todo en reunión con el hermano de Petro.
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Vestidos de blanco y con banderas de la paz y de Colombia estuvieron los marchantes. Las pancartas clamaban una paz para todos. FOTOS CAMILO SUÁREZ -
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28 de febrero de 2023
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Hace más o menos una semana, Juan Fernando Petro —hermano del presidente de la República— se habría reunido con el abogado Edison López —apoderado de la paz total en Medellín— y con el alcalde Daniel Quintero para promover una marcha que apoyara la paz con 12 bandas delincuenciales de la ciudad.
Fuentes que conocieron la reunión aseguran que allí se habló de la importancia de darle un espaldarazo al proceso de paz que la Oficina del Alto Comisionado está adelantando en Medellín, y más después de las salidas en falso del comisionado Danilo Rueda. Se aseguró que ya los jefes de los grupos armados habían dado la orden de salir a marchar y que incluso ya había recursos para bajar a los muchachos de los barrios, que todo contaba con la venia de organizaciones barriales. Además, un profesor universitario y el abogado López citaron en un salón de la Universidad de Antioquia para organizar la marcha.
Pues bien, la reunión tomó vocación de realidad ayer, cuando cerca de 3.000 personas —tal vez más, tal vez menos— marcharon por la paz de los barrios y las comunas, por “los territorios, que es donde se viven los problemas de cada día”, decían varios de los que caminaron portando banderines blancos o con los colores amarillo, azul y rojo.
El movimiento salió de los barrios de Manrique, Alfonso López, San Javier, Santo Domingo o Buenos Aires, entre los territorios que hicieron presencia en la manifestación. En sus zonas abordaron buses que los llevaron a las afueras del centro de espectáculos La Macarena y desde allí se organizaron para caminar hacia la Alpujarra, donde esperaban que “los políticos” oyeran su clamor, expresado verbalmente y en pancartas.
La consigna principal era una: “La paz es de todos”. Eso decían los carteles. Cuando EL COLOMBIANO ahondó en el tema de lo que significaba esa petición, emergieron los líderes de la marcha, que explicaron las razones por las que salieron a las calles. “Lo que queremos dejar claro es que la paz se negocia con tres: el Estado, los actores y las comunidades, las familias que aguantan hambre, que no se pueden comer las tres comidas y que carecen de recursos y empleo”, expresó Carlos Andrés Mesa, que se identificó como líder y vocero de los comerciantes y de las comunidades.
Entre los marchantes había amas de casa, mujeres que gritaban a viva voz “queremos paz” y “no a los falsos positivos”. Se vieron niños y mascotas. Todos los asistentes llevaban camisetas blancas. Y el recorrido fue tranquilo. Los convocados empezaron a llegar a La Macarena hacia las 9:00 a.m. y hacia las 10:30, ya organizados, iniciaron su caminata por San Juan a la Alpujarra.
“Marchamos por los derechos de todos, porque como Pachelly somos noticia por todo lo malo que se dice, pero los queremos invitar a la comuna 6 (de Bello) para que vean que somos gente buena, trabajadora, emprendedora”, comentó Leidy Medina, quien con megáfono en mano gritaba consignas a la paz. Su grupo llevaba una pancarta con un logo que decía Ecopaz y la frase “Pachelly, por la reconciliación para la paz urbana”.
Marta Macías, como se identificó otra de las mujeres, expresó que en las comunas no hay apoyo a la Ley Sometimiento, porque no la consideran equitativa, pues permite que unos actores del conflicto (los alzados en armas) queden en libertad mientras a los de las organizaciones delincuenciales los llevan a prisión.
“Los líderes sociales y la sociedad civil creemos en otras posibilidades, el acuerdo de paz no debe basarse solo en lo jurídico, lo social también es fundamental para que la paz se dé en los territorios”, dijo.
¿Presiones al comercio?
El calor fuerte de la mañana no fue obstáculo para que las personas, especialmente jóvenes, marcharan. A las 11:30 la caminata estaba llegando a la Alpujarra, donde había una manifestación de educadores, la cual se diluyó al cruzarse con la de la paz.
El centro administrativo tenía un cerco montado por el Esmad, con la función de impedir que los manifestantes ingresaran a protagonizar desmanes. Pero en ningún caso hubo siquiera la mínima intención de penetrar el cerco.
“No vamos a hacer ninguna manifestación de violencia, vamos a hacer una oración para cerrar esta marcha que clama por la paz que queremos para Medellín”, dijo el líder Carlos Andrés.
Carlos Augusto Henao, que se identificó como líder de las comunas 5 y 6 y otros barrios, explicó que la ciudad lleva cuatro meses de un laboratorio de paz con el liderazgo de las comunidades y que ese esfuerzo no se puede perder.
“La paz tiene enemigos, pero la paz total debe ser una oportunidad para todos”, sostuvo y se declaró vocero de la Fundación Ser Capaz, que reúne a 34 organizaciones, juntas de acción comunal, empresas, emprendedores y líderes sociales. Cinco minutos antes de las 12:00 del mediodía se dio por terminada la protesta y los asistentes se fueron hacia los buses que los esperaban para regresarlos a sus barrios, donde el comercio había cerrado.
“Por acá los comercios estuvieron cerrados por la mañana, pero a las 11 y media ya estaban abriendo”, dijo un habitante de Castilla.
Los voceros del movimiento dijeron que el comercio cerró para apoyarlos, “a nadie se obligó, el que cerró fue porque quiso”. Pero voceros ajenos a esta protesta expresaron que los negocios cerraron por miedo. “Dieron la orden a los comerciantes de Castilla de no abrir los negocios hoy para apoyar a los que Petro no les cumplió con la paz total”, dijo un líder de la comuna 1.
Nota de actualización: Contrario a las fuentes consultadas por este diario, el abogado Edison López le aseguró a El Colombiano, por medio de una comunicación emitida el pasado 1 de marzo, que la supuesta reunión con Juan Fernando Petro y Daniel Quintero, según él, nunca ocurrió.
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