En el marco de la versión 37 del Congreso Nacional de Exportadores de Analdex, Astrid Martínez, presidenta del Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf), lanzó fuertes advertencias sobre el Presupuesto General de la Nación (PGN) para 2026 y la nueva reforma tributaria presentada por el Gobierno de Gustavo Petro.
De acuerdo con Martínez, el PGN para 2026 crece 5,7 puntos en términos reales (10,6% real sin deuda), pese a la promesa de un presupuesto sin crecimiento más allá de la inflación.
Y es que el proyecto del PGN para 2026 asciende a $557 billones y crecería más de lo habitual. Si en 2025 se concreta el recorte fiscal de $12 billones, el gasto total aumentaría 5,7% en términos reales, es decir, por encima de la inflación. Ese crecimiento, según el Carf, es 1,2 puntos porcentuales mayor al promedio de los últimos 25 años.
Para Martínez, la diferencia entre lo planteado en el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) y lo aprobado en el PGN “refleja nuevos y serios problemas de planeación fiscal”. Esto, explicó, porque el nuevo plan financiero, el gasto primario sube en $18,2 billones (equivalente a 1 punto del PIB), lo que eleva el déficit primario de 1,4% a 2% del PIB.
“Inquieta que la nueva estrategia fiscal pretende financiar gastos persistentes vía fuentes transitorias o inciertas. No hay claridad sobre el contenido ni la viabilidad de los planes de contingencia del Gobierno si la totalidad de las fuentes previstas no se materializan”, alertó la dirigente del Carf.
Agregó que el faltante de recursos para cumplir la meta fiscal de 2026 asciende a $45,4 billones (2,4% del PIB). Para 2027, el esfuerzo fiscal también aumenta: el ajuste requerido en el déficit primario entre 2026 y 2027 pasa de 1,1 en MFMP a 1,7 puntos del PIB (en un solo año).
“Hay factores que podrían incrementar el faltante en 2026, tales como la reserva presupuestal a ser constituida en 2025 y ejecutada en 2026, la entrada en vigor de la reforma pensional, y posibles efectos adversos que el ajuste en la estrategia fiscal pueda producir en los costos de la deuda”, sostuvo Martínez.
Asimismo, afirmó que hay preocupación “por la sistemática sobrestimación de ingresos, la inflexibilidad del gasto y la ausencia de medidas suficientes de ajuste”, que han derivado “en desequilibrios fiscales sostenidos y crecientes”.